Una pastora evangélica abandona la iglesia y ahora triunfa en Onlyfans: “Más feliz que nunca”
La mujer confesó que se acercó a la vida cristiana y se volvió pastora, aunque su gran sueño de niña era ser actriz. ¿Cómo se dio su separación del ámbito religioso?
Aunque creció en el seno de una familia conservadora y dedicó gran parte de su vida a servir a la iglesia de su comunidad, Nikole Mitchell dejó de lado su labor como pastora religiosa tras descubrir lo que realmente le apasionaba. Ella ahora posee un canal en Onlyfans que le da cuantiosas ganancias.
¿Cómo inicio en la plataforma? Fue cuando asistió a una función de teatro. La obra que se presentó tuvo una temática LGBTQ+, y desde ese momento su visión del mundo cambió a tal punto que luego de unos meses se divorció y emprendió su camino por la red social para adultos. La expastora sostuvo que se siente “más feliz que nunca” con su nueva vida.
PUEDES VER: Aida Cortés, la modelo de OnlyFans que ofrece réplicas “exactas” de sus genitales en línea
La mujer de 36 años de edad comentó que había sentido que una parte de ella estaba escondida debido a su ideología conservadora. Por ello llevó su vida de manera “normal”, y se casó con un hombre con el que tuvo dos niños.
A través de una conversación con el medio New York Post, comentó que se acercó a la vida cristiana y se volvió pastora, aunque su gran sueño de niña era ser actriz. Como se sabe, el líder de una iglesia transmite un mensaje en un púlpito, desde donde puede desenvolverse.
Sin embargo, tras conocer a personas religiosas que apoyaban el movimiento LGBTQ+ e ir a un evento gay, admitió que era bisexual. A los dos años de divorcio, Mitchell abrió una cuenta en OnlyFans donde comenzó modelando lencería. Ella admitió que quiso experimentar cómo se sentía que le paguen por producir contenido explícito.
“Empecé muy tímida, como tomar fotos en topless, pero ahora llegué al punto en que tomo solicitudes personales y hago videos muy adaptados a los deseos específicos de las personas”, relató para el medio.
Mencionó que cualquier persona tiene el derecho de expresarse como desee. “Mi sexualidad es increíblemente sanadora y sagrada. Y cuando le doy este regalo a la gente, los bendigo”, señaló la mujer.
