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Bolsonaro confirmó que irá a la Asamblea General de la ONU pese a no estar vacunado

El presidente de Brasil afirmó el último jueves que asistirá a la Asamblea General de las Naciones Unidas, que tendrá lugar en Nueva York, pese a que el Gobierno de la ciudad impuso como requisito el certificado de vacunación contra la COVID-19.

El 9 de setiembre el área de Salud de la ciudad de Nueva York informó mediante una carta por las autoridades del lugar que cualquier persona que asista a las instalaciones de la ONU requerirá estar vacunado.“Todas las personas que ingresen a las instalaciones de la ONU con el fin de entrar en la Asamblea General necesitarán mostrar un certificado de vacunación”, señalaba la misiva.

No obstante, Jair Bolsonaro, presidente de Brasil, reafirmó que será parte del importante evento —foro que reúne a los 193 Estados miembros para deliberar diferentes temas internacionales— y que, incluso, será el encargado de dar el discurso de inicio.“Voy a estar la semana que viene en la Asamblea General de la ONU; voy a dar el discurso de apertura”, comunicó el mandatario en su habitual transmisión por redes sociales.

“Un discurso tranquilo, bastante objetivo, enfocado en los puntos de interés para nosotros”, agregó Bolsonaro, que también destacó el manejo de la pandemia en Brasil y el crecimiento del agronegocio y la energía.

Por su parte, Antonio Guterres, secretario general de la ONU, señaló que pese al comunicado del área de Salud de Nueva York, no estaría permitido imponer como requisito un certificado de vacunación contra la COVID-19 a los jefes de Estado que asistan a la Asamblea.

Según información de Our World in Data, Brasil se encontraría en el cuarto puesto de países a nivel mundial en administración de vacunas contra el coronavirus, aproximadamente 214 millones.

Sin embargo, Jair Bolsonaro hasta el momento se ha negado a recibir la inoculación y ha manifestado que será “el último” brasileño en recibir la vacuna contra la COVID-19. En esa línea argumenta que ya se encuentra inmunizado, pues el año pasado se contagió. “Mi tasa de anticuerpos están en la cima”, señaló el mandatario.