EE. UU.: aerolíneas civiles ayudarían a aviones militares a evacuar a refugiados afganos
En un comunicado emitido por El Pentágono, el gobierno de Estados Unidos reveló que varios aviones comerciales contribuirían en las labores de salvamento de afganos.
Lloyd J. Austin, secretario de Defensa de Estados Unidos, pidió este domingo 22 de agosto el apoyo de varias aerolíneas comerciales en las labores de evacuación de los refugiados en Afganistán. Así se dio a conocer en una nota de prensa que se difundió a través del portal del Departamento de Defensa de EE. UU. más conocido como El Pentágono.
En el comunicado se menciona a las aerolíneas comerciales que participarían, con 18 aviones en total, para esta labor, las cuales son: American Airlines, Delta Airlines, Omni Air, Atlas Air (3 cada uno), Hawaiian Airlines (2) y United Airlines (4).
Para que el trabajo en conjunto se llegue a dar se activará la Etapa I de la Flota Aérea Civil de Reserva (CRAF por sus siglas en inglés), esto permitirá al Departamento de Defensa el acceso a los recursos de la movilidad aérea comercial, en tanto, prevén que esto no causará un impacto importante en los vuelos comerciales.
Los aviones elegidos para esta operación, activados por CRAF, no se dirigirán al Aeropuerto Internacional Hamid Karzai de Kabul, sino que serán utilizados para el traslado de pasajeros desde refugios seguros temporales y bases de estacionamiento provisionales. De esta manera, le permitirá a las aeronaves militares concentrarse directamente en operaciones dentro y fuera de la capital afgana.
“Esta es la tercera activación de CRAF en la historia del programa. El primero ocurrió, en apoyo de las Operaciones Escudo del Desierto / Tormenta (agosto de 1990 a mayo de 1991), y el segundo fue para la Operación Libertad Iraquí (febrero de 2002 a junio de 2003)”, se añade en la nota.
Estados Unidos y sus aliados vienen coordinando esfuerzos por evacuar a cientos de civiles de Afganistán, después de que los talibanes retomaran el poder el pasado 15 de agosto. Al respecto, la Unión Europea (UE) considera “imposible” sacar a todo el mundo a tiempo, en lo que se ha considerado una de las evacuaciones aéreas más difíciles de la historia.