Andrea Cortés, primera mujer trans en las filas de la Policía de Colombia
Andrea quiere velar por los derechos de las mujeres en situación de vulnerabilidad, para combatir la violencia de género. También desea convertirse en una abanderada de los derechos LGBTI.
Andrea Cortés Guarín, de 26 años, es la primera mujer trans en ser parte de la Policía de Colombia. Estudia comunicación social y su meta es, a través de su trabajo, convertirse en defensora de los derechos de las mujeres y de la comunidad LGBTI.
Sin embargo, su integración a la Fuerza Pública no fue fácil, ya que la institución le notificó que no podían aceptar el cambio de su nombre y sexo porque cuando se incorporó a la Policía lo hizo como hombre. Frente a esta situación, ella decidió instaurar una tutela y buscó la asesoría de Diana Navarro Sanjuán, una reconocida abogada trans.
“En un permiso viajé a Popayán y la doctora Navarro me estaba esperando. Ella redactó la tutela, me asesoró y apoyó en todo el proceso, que no fue fácil. A esta mujer le debo mucho”, sostuvo Cortés en una entrevista con el diario El Tiempo.
En mayo de 2018, el Tribunal Superior del Distrito Judicial de Popayán le notificó a la Policía Nacional que la debía reconocer el derecho al desarrollo de la libre personalidad, la personalidad jurídica, la vida digna y la igualdad a Andrea Cortés Guarín.
La Policía hizo caso a la orden y le permitió seguir con sus funciones. Pero su lucha no termina ahí, ella quiere ayudar a las mujeres que sufren violencia de género, violencia intrafamiliar y ser una defensora de los derechos LGBTI.
Andrea Cortés se incorporó a los 18 años a la Policía. En 2015 inició su tratamiento hormonal y, en 2017 hizo el cambio en su registro civil. Foto: El Tiempo
Desde que tenía 9 años, Andrea identificó como una mujer y eso derivó a que sufriera bullying escolar. Al terminar la secundaria, a los 18 años, se fue a prestar servicio como auxiliar regular de la Policía.
“Cuando yo entré a prestar mi servicio militar como auxiliar de la Policía, la Institución sabía que yo era homosexual. Esa condición hoy es avalada y respetado en la Fuerza Pública”, señaló la agente.
Mientras estuvo prestando el servicio, Andrea tomó la decisión de comenzar un tratamiento hormonal y seguir en la institución, ya que tenía vocación para este tipo de carrera. La policía se graduó en enero de 2016 como Fabio Cortés Guarín y fue designada al departamento de Cauca.
Tiempo después, Andrea fue evaluada por una psicóloga que le sugirió informar a sus superiores sobre su identidad de género y de esa forma poner en regla sus documentos, y que lo hiciera legalmente cambiando su nombre.
“En un permiso viajé a Bucaramanga (en septiembre de 2017), y fui a la Registraduría y cambié mi registro civil y mi cédula. Y regresé con una contraseña que me identificaba como Andrea Cortés Guarín”, señaló.
Pese a que el proceso de documentación fue complejo, aseguró: “en la gran mayoría de compañeros he encontrado mucho respeto hacia mi persona y hacia mi decisión de ser una mujer trans”.
Andrea es la mayor de tres hermanas y afirma con orgullo que fue su mamá, Jackeline Cortés Guarín, la que vio por ellas y las sacó adelante. Foto: Sinú al Día
El proceso de Andrea inició a los 19 años y finalizó el año pasado cuando bordeaba los 25 años, ahora está decidida a realizarse el cambio de voz.
“Me realizo el cambio de voz porque creo que es un complemento a toda la transición que he recorrido hasta el momento. Es un plus para mí, el complemento de la feminización de voz”, afirmó la uniformada al medio Zona Cero.
La policía asegura que el respaldo y amor de su familia ha sido clave para afrontar el duro camino. “Mi familia es mi motor de arranque, mi mamá, mi abuela, mis dos hermanas, son mi apoyo total”, finalizó a El Tiempo.