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Transmisión de COVID-19 en niños dentro la escuela es menor, reveló estudio francés

El estudio, que fue realizado en una comuna francesa muy golpeada por la pandemia de coronavirus, corroboró que hubo pocos contagios dentro de los centros educativos. No obstante. hay otras investigaciones que señalan lo contrario.

Los niños con edades comprendidas entre 6 y 11 años transmiten poco la COVID-19 en la escuela, ya sea a sus compañeros o a los adultos, un dato “tranquilizador” para los países que reabren estos establecimientos, según un estudio divulgado este martes por el Instituto Pasteur de Francia.

“En general, los niños se contagian en el seno familiar, normalmente a través de sus padres, pero después lo transmiten poco en la escuela”, explica a la AFP el autor principal, el doctor Arnaud Fontanet.

Este estudio corrobora otros trabajos similares. Sin embargo, sus resultados son preliminares y todavía no han sido publicados en una revista especializada, prueba de su validación científica, subraya Pasteur.

Fue realizado en seis escuelas primarias de Crépy-en-Valois (norte francés), una comuna muy golpeada por la epidemia entre febrero y marzo. Un total de 1.340 personas se sometieron a los test de detección de anticuerpos, entre ellos 510 niños y el resto adultos, incluidos profesores y familiares.

Estudio realizadado en una comuna de Francia arrojó que los niños en las escuelas no son tan contagiosos. Foto: AFP.

Parents and children arrive at the Jules Julien elementary school in Toulouse, southern France, on June 22, 2020 following the reopening of schools as France eases lockdown measures taken to curb the spread of the COVID-19 (the novel coronavirus). (Photo by Lionel BONAVENTURE / AFP)

Los investigadores identificaron a tres niños de otras tantas escuelas contagiados con el nuevo coronavirus antes de que los establecimientos cerraran en el marco del confinamiento. Ninguno de ellos infectó a nadie en la escuela durante las tres semanas en que hubo exposición.

Aunque se trata de un periodo relativamente corto para sacar conclusiones definitivas, el dato "es otro grano de arena" que se suma a estudios similares en el mundo, según Fontanet.

En un principio, se pensó que la COVID-19 podía ser altamente contagiosa entre los niños, como lo es por ejemplo el virus de la gripe. Otros estudios iniciales mostraron, además, que los pequeños tienen una carga viral del SARS-CoV-2 tan elevada como los adultos, sugiriendo por tanto que contagiaban lo mismo.

“Que yo sepa, nunca hubo un (brote) epidémico (de la COVID-19) que partiera de una escuela”, prosigue Fontanet, miembro del consejo científico que asesora al Gobierno francés frente al nuevo coronavirus.

Con la ralentización de la epidemia en Europa, algunos países empezaron a reabrir las escuelas. En Francia, todos los niños están llamados a volver a clase desde el lunes tras un periodo de transición en el que solo se acogió a un pequeño porcentaje de alumnos.

"El riesgo de que la epidemia resurja a partir de una escuela o de que un profesor se infecte a partir de alumnos menores de 10 años, me parece muy pequeño". En cambio, para los alumnos de establecimientos de secundaria de entre 16 y 18 años, "tengo mis reservas", según Fontanet.

Un estudio anterior que también llevó a cabo Fontanet mostró cómo la epidemia se había disparado en un instituto también de Crépy-en-Valois.

Entre las 1.340 personas del trabajo sobre las escuelas primarias, 139 (81 adultos y 58 niños) se infectaron en algún momento con el nuevo coronavirus. Entre los pequeños, esto representa un 8.8 %.

El 61 % de los padres de niños contagiados también contrajeron el virus, frente a 6,9 % de los padres de niños no contagiados. Los investigadores deducen que en general los progenitores contagiaron a los niños y no al revés.

Los profesores salieron casi indemnes: solo se infectaron 3 de 42 (7 %).

Finalmente, más de 41 % de los pequeños contagiados (24 de 58) no declararon síntomas (frente a solo 9,9 % entre los adultos).

“Esto confirma lo que ya sabemos: los niños desarrollan formas leves de la enfermedad”, recuerda Fontanet.