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Hombres crean prototipo de respirador artificial para luchar contra el COVID-19 [VIDEO]

Los dos creadores del ejemplar solicitan colaboración de las autoridades y empresas privadas para empezar con la fabricación en Ecuador.

Dos ecuatorianos crearon un respirador artificial con el fin de ayudar en la emergencia del coronavirus. Foto: Captura
Dos ecuatorianos crearon un respirador artificial con el fin de ayudar en la emergencia del coronavirus. Foto: Captura

Ante la propagación del virus en Ecuador, que ha dejado 27 víctimas mortales, dos ciudadanos han creado un prototipo de respirador artificial con el objetivo de ayudar en la emergencia por la pandemia del coronavirus (COVID-19).

Se trata de Francisco Astudillo y César Naranjo, quienes pasaron 48 horas fabricando un respirador con componentes sencillos, con el fin de que con la ayuda del Gobierno, la empresa privada y la población se puedan producir más de estos equipos para salvar la vida de los enfermos que desarrollan graves problemas respiratorios.

Tal proyecto podría ser de gran apoyo, ya que varios países han padecido de relevantes brotes de coronavirus, y muchos pacientes han fallecido por la fuerte demanda de respiradores que existe en los centros de salud.

Asimismo, Naranjo contó que su propósito es buscar el financiamiento para empezar a producir a gran escala el respirador artesanal y compartir los planos para que se puedan replicar en todo el territorio ecuatoriano.

Por su parte, Astudillo manifestó que ahora necesitan que las entidades particulares comiencen a cooperar con el Gobierno para unirse y, de esa manera, enfrentar la pandemia que afecta al país.

Agregó que el ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, ya se comunicó con ellos, y tienen una reunión pendiente este jueves 26 de marzo con los especialistas del hospital Eugenio Espejo, para examinar el prototipo y determinar si requiere alguna mejora o ajuste.

“Es una guerra y hay que pelear. Si nos quedamos en la casa acostados va a morir todo el mundo. Es mejor pelear”, indicó Francisco, quien considera que con unos 20 000 o 50 000 dólares podrían iniciar con la producción.