Economía

Vacancia no afecta la confianza ni el crecimiento

Horas claves. Los indicadores para el cierre de este año no se comprometerían con la nueva administración de Dina Boluarte. Se requiere un gabinete consensuado para no estropear el crecimiento económico del 2023, proyectado hasta en 3,9%.

.
.

A pesar del remezón político generado por el fallido golpe de Estado de Pedro Castillo y su posterior vacancia, no se afectarán los estimados de crecimiento económico para este año y el 2023 –que en sus escenarios más optimistas serían de 3,0% y 3,9%, respectivamente– (ver infografía).

Según Hugo Perea, economista jefe del BBVA Research, en el corto plazo tampoco se espera un deterioro completo de la confianza empresarial ni que el dólar se dispare abruptamente.

“El intento de golpe se diluyó rápido. Si bien el dólar saltó a más de S/3,90, rápidamente cayó (a S/3,825). La presidenta Dina Boluarte debe formar un buen gabinete, siendo claves el MEF, Produce y MTPE. En función a eso tendremos una idea de cómo evolucionarán las políticas públicas y su impacto en la economía para los siguientes meses”, señaló para La República.

Destino marcado desde antes de la crisis

El economista Eduardo Recoba alega que la economía peruana continuará su curso en lo que resta del año, ya que desde antes del accionar de Castillo Terrones, ya la actividad productiva se encontraba deteriorada.

Es menester precisar que en el transcurso del 2022 las estimaciones del desarrollo económico han ido reduciéndose por factores exógenos –como la inflación global– e internos –léase, las pugnas entre el Congreso y Palacio de Gobierno–.

“La herencia económica del golpista Castillo es la de un derrotero extremadamente complicado, pero puntualmente la situación no ha movido la aguja de los mercados”, añadió.

“Sector privado a la defensiva”

No obstante, la mayoría de las expectativas empresariales continuó retrocediendo en noviembre, en datos del BCRP, a tal punto que para los próximos 12 meses el ratio de confianza de los empresarios para sus negocios cayó de 57,4 a 54,3 unidades.

Ello, en un contexto donde la inversión privada cerrará el año con una variación del 0% –es decir, estable– y para el 2023 llegaría a 1,8%.

“Está muy defensivo el sector privado. Creciendo como antes en 5% o 6%, la inversión privada aportaría un punto más al PBI. Requerimos un buen clima para los negocios y reducir las tensiones políticas”, subrayó Perea.

¿Cuáles deben ser las prioridades?

Recoba coincide en que la actividad privada operará en un rango muy marginal, y es aquí donde la presidenta Dina Boluarte tiene el rol histórico para buscar consensos políticos y económicos, algo “no visto en los últimos 16 meses”, para el cierre de brechas tanto en el corto como en el largo plazo.

A su criterio, dentro de los lineamientos económicos inmediatos se debe apostar por una correcta gestión de presupuesto y un gasto público de gran impacto, ya que “el gasto con Castillo ha sido torpe y tímido”, y son una especie de barómetro frente a la inversión privada a través de las asociaciones público privadas (APP) y las obras por impuestos (OxI).

Aparte están las transferencias focalizadas en vez de la exoneración de impuestos a la compra de alimentos, así como la creación de empleos formales y prolongados, considerando que la capacidad adquisitiva de los peruanos no ha mejorado en dos años y medio de pandemia.

Vale acotar que actualmente 10 millones de compatriotas en el área urbana se desarrollan en la informalidad y el espectro formal cayó a 4 millones.

Por último, Recoba considera que se debe proteger la política fiscal amenazada por un “Congreso totalmente inepto en función a finanzas públicas”.

Claves

Inflación. Según Julio Velarde, presidente del BCRP, la inflación comenzará a caer fuertemente desde marzo del próximo año.

Respaldo. La Confiep ratificó su compromiso de trabajar de la mano del Gobierno de Dina Boluarte por el bien “social y económico de todos”.

.

.

.

.