En los interiores del centro comercial Unicachi, ubicado en el distrito de San Martín de Porres, un sujeto fue capturado mientras falsificaba billetes de S/100 con la meta de generar S/8 millones. Estas impresiones ilegales tenían como destino Bolivia, país vecino que se encuentra en una crisis económica grave por la devaluación del peso boliviano, donde ahora el sol peruano ha tomado relevancia.
La Policía Nacional del Perú (PNP), a través de la Dirección de Policía Fiscal, capturó al delincuente mientras se encontraba vigilando las impresiones de los billetes de soles falsos. Con su detención, también se han incautado de las maquinarias y materiales que utilizaba.
Junto a funcionarios de la Oficina Central de Lucha Contra la Falsificación Numeraria del Banco Central de Reserva (BCR), la PNP detuvo en flagrancia al delincuente que se encontraba imprimiendo los billetes falsos en el centro comercial Unicachi, en la avenida Caqueta, distrito de San Martín de Porres.
Según las investigaciones preliminares del equipo policial, el sujeto retenido de su libertad pertenecería a la banda criminal "Dolar Black", quienes se presume delinquen imprimiendo dinero falso.
Impresión de billetes falsos. Foto: PNP
En el operativo, se incautaron las siguientes materias:
La devaluación de la moneda boliviana, el peso boliviano (BOB), ha sido el resultado de varios factores económicos y políticos que han afectado al país en los últimos años. Bolivia mantuvo una estabilidad monetaria durante mucho tiempo, gracias a políticas cambiarias estrictas y reservas internacionales robustas. Sin embargo, en los últimos años, esa estabilidad se ha visto afectada por diversos factores:
Bolivia ha visto una disminución considerable de sus reservas internacionales, que actúan como un respaldo para la estabilidad de la moneda. Las reservas se han reducido principalmente debido a la caída en los precios de exportación de gas natural, uno de los productos clave del país. Bolivia depende mucho de la exportación de hidrocarburos, y la disminución en la demanda y precios internacionales ha reducido los ingresos en dólares, debilitando la capacidad del Banco Central para defender el tipo de cambio.
El gobierno boliviano ha enfrentado varios años consecutivos de déficit fiscal, es decir, ha gastado más de lo que ha ingresado. Para cubrir estos déficits, el gobierno ha utilizado reservas y ha incrementado su endeudamiento. Este contexto crea presiones sobre la moneda, ya que el país necesita más dólares para cubrir sus compromisos, lo que debilita la capacidad de mantener el tipo de cambio fijo.
Aunque la inflación en Bolivia ha sido moderada en comparación con otros países de la región, ha habido señales de presión inflacionaria debido a la reducción en la capacidad del gobierno para importar productos a precios subsidiados y la menor disponibilidad de divisas. La percepción de una economía débil y la disminución de la confianza en la política económica del gobierno también han afectado la estabilidad del boliviano.
Falsificar los billetes nacionales, está tipificado como un
delito de falsificación de moneda en el Artículo 253 del Código Penal. Las penas para este delito son severas, dado que afecta la economía nacional y la confianza en el sistema financiero.