Un camión cisterna, que se dirigía a abastecer de agua en una zona de San Juan de Miraflores, se despistó en horas de la noche del último lunes y quedó a punto de caerse sobre unas viviendas en la zona conocida como Las Rocas, en Pamplona Alta. Los vecinos se mostraron atemorizados y pidieron ayuda.
Al parecer, el conductor del vehículo no pudo maniobrar bien mientras pasaba una curva, por lo que el vehículo se quedó atorado. Además, cabe resaltar que no había pista, sino una trocha que dificultaba aún más el tránsito. Las llantas laterales quedaron prácticamente al aire y las imágenes recopiladas reflejan que con un mal movimiento la cisterna puede caer.
Los vecinos del lugar alegaron que durante toda la noche no pudieron descansar tranquilos, ya que sintieron temor de que el vehículo pueda desprenderse caer. En ese sentido, uno de los residentes aseguró que la misma vía fue hecha por los vecinos, pues no había una zona por donde transitar.
La caída del vehículo puede generar daños materiales. Foto: difusión
Las familias que se encontraban bajo la amenaza tuvieron que evacuar inmediatamente y durante varias horas de la madrugada intentaron solucionar el problema apaleando la arena. Dicho intento cesó por temor a que el vehículo pueda ceder a la caída y se desplome.
Hasta el momento, no se ha pronunciado ninguna autoridad, pero se espera que en las próximas horas el camión sea retirado del lugar.
Por otro lado, también se dio a conocer que la hora en la que transitaba el vehículo era inusual, pues por lo general el abastecimiento de agua suele hacerse en horas de la mañana. Además, las curvas de la zona dificultan el paso, por lo que se especula que el chofer no conocía mucho el lugar y realizó una mala maniobra.
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Intentan retirar la cisterna. Foto: difusión
Los vecinos aseguran que desde la noche han estado pidiendo ayuda, pero con el pasar de las horas ningún representante del distrito se ha apersonado al lugar para buscar soluciones. Solicitaron que se lleve maquinaria para extraer la arena y retirar con cuidado el enorme vehículo.
Cabe resaltar que la cisterna ya no tenía agua, por lo que el peso de alguna manera se aligeraba. Sin embargo, la incertidumbre persiste, pues un leve movimiento puede generar el desprendimiento de varias rocas.
Otras de las quejas que hubo fue sobre el volumen de los carros que transitan la zona. Por el hecho de ser una vía estrecha deberían de pasar carros livianos y que no carguen mucho peso, esto según uno de los dirigentes del lugar. Por ello, recomendó que se organice mejor la distribución del agua para que no se vuelva a repetir lo sucedido.