Fue el 28 de mayo que Verónica Vilca denunció a su pareja, Narciso Choque Mamani (30) por violencia física y psicológica. Lo hizo en la comisaría de Paucarpata. La joven consiguió una medida de protección: Choque no podía acercarse a ella. La orden fue dictada por el Juzgado de Familia de ese distrito arequipeño.
El lunes último, Narciso Choque Mamani incumplió la orden y la mató. Tras cometer el feminicidio, intentó suicidarse. Previamente, dejó escrito un mensaje en la pared reconociendo su culpabilidad.
Cuando los agentes de la comisaría de Juan de Dios Colque Apaza ingresaron al inmueble, encontraron a la mujer sin vida, sobre una cama. Narciso yacía a un lado de la víctima, retorciéndose de dolor y ahora este chofer de transporte público permanece con custodia en el hospital Goyeneche.
Narciso Choque Mamani cometió el décimo feminicidio en Arequipa y el n° 78 a nivel nacional Verónica se convirtió en la décima víctima de feminicidio eny la n° 78 a nivel nacional, en lo que va del año (feminicidios y muertes violentas). La Cuarta Fiscalía de Violencia Contra la Mujer e Integrantes del Grupo Familiar de Arequipa solicitó 18 meses de prisión preventiva para él.
El 24 de junio, Misael Ramos (18) asesinó a Pamela Casafranco Contreras (38) por oponerse a que su hija retome la relación sentimental que tenía con él. La víctima deja dos menores en la orfandad.
Dos días antes, Pilar Flores (28), ciudadana venezolana, fue asesinada en la asociación El Bosque, en Trujillo.
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De acuerdo con la jueza suprema Elvia Barrios, presidenta de la Comisión de Justicia de Género del Poder Judicial, de las 96.721 medidas de protección solicitadas en los primeros cuatro meses de este año, se otorgaron 74.441 restricciones. El 23% no la recibió porque los fiscales o jueces concluyeron que no eran razonables.
Desde el 2016 se han otorgado 1.604.570 medidas de protección.
Si eres o conoces a alguien que ha sido afectada o involucrada en hechos de violencia familiar o sexual, comunícate de manera gratuita a la Línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, que cuenta con un equipo especializado en “brindar información, orientación y soporte emocional”.
Además, la Línea 100 tiene la facultad de derivar los casos de violencia familiar o sexual más graves a los Centros de Emergencia Mujer o al Servicio de Atención Urgente. Este servicio atiende las 24 horas, todos los días del año (incluye feriados).