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Sociedad

Piden revaluar proyecto que prohíbe llamadas spam

Tema en debate. Asociación Apexo dice que se perderían 20 mil empleos. Congreso indica que se vulnera libertad del consumidor.

larepublica.pe
Las llamadas spam pueden resultar molestas para unos y oportunas para otros. Foto: Composición LR

Al día, un usuario puede recibir un promedio de seis llamadas provenientes de ventas, promociones o spam, según la Encuesta Nacional de Comunicaciones hecha por Indecopi en 2022. Hace una semana, la Comisión de Defensa del Consumidor del Congreso volvió a aprobar el proyecto que busca modificar la ley 29571, con la finalidad de eliminar las comunicaciones o mensajes spam. Previamente, fue observada por el Ejecutivo al ir contra el derecho de empresa e información.

Para el presidente de la Asociación Peruana de Experiencia del Cliente (APEXO), Guy Forter, esta iniciativa podría significar el recorte de 20.000 puestos en el área de call centers, quienes ofrecen este servicio a las compañías. Agregó que el no permitir estas comunicaciones implica que el usuario no se entere de algunos beneficios que pueden ser favorables para su línea, deuda u otra índole. Además que debería volverse la plataforma ‘Gracias no insista’. “Debe existir un equilibrio para que haya una regulación y así las personas no pierdan su empleo”, acotó.

Ejecutivo ya observó la ley antispam por ir contra el derecho de empresa e información. Foto: Composición LR.

La propuesta legislativa

En la actual propuesta del Parlamento se busca que el propio usuario dé la autorización para que reciba este tipo de llamadas. Sin ello, las empresas estarían prohibidas de comunicarse con ellos.

Al respecto, el Consejo Nacional de Usuarios de Comunicación indica que estas llamadas sí perjudican al usuario y debería reconsiderarlo el Gobierno de Boluarte. Entre tanto, Aspec también opina que debe primar el derecho del usuario.

La palabra

Guy Forter, presidente de APEXO

Vamos a regresar seis años atrás donde vas a tener a gente repartiendo información en las calles y muy probablemente con mucha informalidad, sin un puesto formal como ahora”.