El proyecto Río Verde data de 1985 y consiste en la recuperación de la ribera del río Rímac. Esta megaobra ha sido aceptada, premiada y explicada más de una vez por su desarrollador, el arquitecto Augusto Ortiz de Zevallos. Sin embargo, a pesar de tener los expedientes técnicos terminados y planos ejecutables, aún no se hace realidad.
Las intenciones políticas desde la Municipalidad Metropolitana de Lima han sido distintas y diversas, y han pasado dos gestiones desde la última vez que este proyecto estuvo más cerca de ver la luz.
En comunicación con La República, Augusto Ortiz de Zevallos aseguró que con la ejecución de Río Verde, las zonas aledañas se activarán y ello dinamizará la economía. Además de rescatarlo, se recuperaría y ampliaría el turismo en el centro de Lima.
“Ahora es un desastre, un botadero, pero si el río se reconvierte, cualquier persona que vive o está ahí podría ofrecer comida, servicios, alojamiento, oferta de cosas: el turismo crece. La transformación es automática y esto genera otro estilo de vida, la gente cuida, la gente protege y en el proyecto está todo previsto”, detalló Ortiz.
La recuperación de la ribera del río Rímac también tuvo protagonismo durante la última campaña al sillón municipal. Tal es así que, durante una entrevista con Exitosa, el virtual alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, hizo referencia al proyecto Río Verde y aseguró que iba hacerlo realidad.
“Muñoz está dejando un expediente técnico muy interesante, que es hacer un malecón ecológico verde frente al río Rímac, ya lo tiene listo. Eso era de Villarán, es mérito de ella, y Muñoz lo ha mejorado. Está listo y hay que hacerlo, para tener la ribera del río Rímac tipo Italia o Santiago de Chile”, declaró.
Efectivamente, durante el gobierno de Susana Villarán, Río Verde obtuvo un fideicomiso de 74 millones de dólares para ser ejecutado, pero ¿qué pasó con el proyecto?, ¿por qué no se ha ejecutado hasta el momento?, ¿qué contempla toda la obra que busca recuperar uno de los ríos más contaminados del Perú?
El proyecto Río Verde data de 1985 y en 1987 fue aprobado por unanimidad en la Municipalidad de Lima. Dos años después, en 1989, fue incluido en el Plan de Desarrollo Metropolitano de Lima y Callao 1990-2010.
Es así que, en la gestión de Ricardo Belmont, Río Verde quedó perfilado, diseñado y aprobado por el Instituto Nacional de Cultura. Sin embargo, pasaron siete años para que otro alcalde, Alberto Andrade, lo considerara dentro de sus planes en la recuperación del centro histórico, pero el proyecto tampoco vio la luz.
En el 2011, la entonces alcaldesa Susana Villarán retomó el proyecto Río Verde y, a través de una adenda, consiguió que la empresa constructora brasileña OAS, que estaba a cargo de la obra Línea Amarilla, destinara un fideicomiso de más de 74 millones de dólares.
Sin embargo, en el 2015, durante la gestión de Luis Castañeda, el proyecto Río Verde fue suspendido y, en su lugar, se construyó el by-pass de la av. 28 de Julio, para lo cual se hizo uso del fideicomiso.
Luego de varios años, en enero de 2022, el exalcalde Jorge Muñoz firmó un convenio de cooperación técnica no reembolsable con la Corporación Andina de Fomento (CAF) por un monto de 600.000 dólares para emplearlo en el estudio de preinversión del Proyecto Especial Paisajístico Río Rímac, que pretendía intervenir el río Rímac a lo largo de cuatro kilómetros.
Infografía - La República
Río Verde contempla la construcción de 25 hectáreas de áreas verdes en la ribera del río Rímac. En él se levantaría un nuevo museo, plazas, un anfiteatro, puentes peatonales y un extenso malecón.
“En el 87, cuando se aprobó, se decía que la única forma de rescatar el centro de Lima era en espacio del río, porque son kilómetros de parques, de paseo natural, que ya está ahí y lo que hay que hacer es cambiar un botadero y un vertedero por un parque en el suelo contiguo al río, en ambas riberas, que es suelo público y, por lo tanto, muy fácil hacer esa transformación”, explicó el arquitecto Ortiz.
La ejecución de Río Verde, con estudio técnico listo y planes ejecutables, contempla cuatro áreas con el Estudio Definitivo de Ingeniería (EDI):
Foto: captura de expediente.
Río verde - puentes peatonales
Foto: captura de expediente
Foto: captura de expediente
El también urbanista Augusto Ortiz aseguró que el proyecto Río Verde le otorga un espacio en mejores condiciones ambientales y salubres a la comunidad shipiba conibo que vive hace más de 20 años en Cantagallo. “Río Verde transforma lo que ahora es un mundo sumamente conflictivo, con barrios inseguros, espacios tugurizados, espacios a los que se les tiene miedo”, agregó.
“Con la comunidad de shipibos se negoció y ellos aceptaron en dos oportunidades para recuperar la ribera. Ellos estaban felices porque se les integraba con los barrios aledaños, y dejarían de estar excluidos. El río Rímac y el centro de Lima debe ser un destino turístico”.
Dentro de las negociaciones, la comunidad iba a ser reubicada en un complejo habitacional en el que se iban a construir colegios, parques y centros de recreación para la comunidad. “Ellos, si esta obra se retoma, podrían mudarse al frente del río porque el terreno en que ahora están está contaminado, peligroso y malo para su salud”, resaltó Ortiz.
Foto: John Reyes Mejia
De acuerdo a las proyecciones y calendario de ejecución, la obra Río Verde podría estar terminada en menos de dos años. “La ejecución de las obras no tomaría mucho tiempo y se podrían hacer fácilmente en año y medio”, dijo Ortiz.
“Primero, no hay que expropiar nada, la obra se pone en un suelo que ya está y que es público. Entonces son obras que pueden comenzar automáticamente, hasta los puentes están previstos con calendario”, detalló el arquitecto.
Ortiz resaltó que “en la práctica, es una obra que no tiene tiempos muertos previos, casi no hay excavaciones, no ocurre lo mismo que en las obras mayores, no hay expropiaciones, problemas legales, recursos de amparo, etc.”.
“Aquí es un suelo público, por eso es una obra que empieza inmediatamente. Simplemente, se autoriza, se empieza a preparar el suelo y se ponen las pilas y se hacen. Y con la comunidad shipibo se llegan a nuevos acuerdos”.
¿Qué pasó con Rio Verde, la obra que tenía como objetivo recuperar la ribera del río Rímac?
Además, refirió el especialista, la obra se ejecuta y entrega por tramos. “Pueden hacer un malecón de un puente y el otro, y ya se empieza a usar. Se va haciendo y se va integrando y activando lugares”, resaltó.
Por otro lado, “Río Verde es una obra que a futuro puede ampliarse, tanto para arriba como para abajo, como la parte del río que se ubica en el Callao. Si el alcalde entrante, que ya lo ha mencionado antes como una propuesta, hace suya la obra, beneficiaría incluso en la recaudación del municipio porque no es una inversión muerta“, finalizó Ortiz.