Arequipa: confeccionistas de camisetas tienen esperanzas en el partido Perú vs Australia para reactivarse
Puntapié para la reactivación. La pandemia hundió a microempresarios del sector textil. La clasificación de la selección a Qatar 2022 puede ser una oportunidad para incrementar la venta de camisetas. Todo está en manos de Gareca y sus once muchachos.
En los pies de Lapadula, “Oreja” Flores y compañía, no solo están las esperanzas de la afición, también de los confeccionistas de camisetas. Con la blanquirroja en Qatar, los microempresarios de confección de Arequipa, tienen la oportunidad de vender más casaquillas y reactivarse luego de la cruda pandemia.
Con Rusia 2018, las ventas casi se cuadruplicaron, recuerda Graciela Nayhua, presidenta de la Asociación de Empresarios Productores Textiles P.I. Este gremio congrega a los negocios de confección de las calles Deán Valdivia, Pizarro y San Camilo, llamada la “Gamarra de Arequipa”, comprende a cerca de 300 microempresarios. Hace cuatro años, el que menos compró su camiseta de la selección, señala Nayhua, y que incluso se hicieron envíos a Chile para la colonia peruana.
Con la fiebre mundialista de 2018, aumentaron los campeonatos deportivos y creció la demanda de uniformes. La emergencia sanitaria empezó al inicio de la temporada escolar del 2020. Se dejaron de comprar uniformes y buzos colegiales.
Hasta febrero de este año -señala Graciela Nayhua- las ventas estaban en 60 % del periodo previo a la pandemia. Pero el tramo final del equipo de Gareca en la eliminatoria, con sus partidos ante Uruguay y Paraguay, reavivó el interés en el fútbol y empujó las ventas, donde la mayoría de requerimientos fueron las camisetas infantiles. Ahora están al 75% de una época normal.
Mundial e impacto real
¿Un mundial puede empujar la economía? Especialistas coinciden en que sí genera un movimiento económico en determinados rubros. El economista Patricio Quintanilla refiere que los negocios de confección, consumo (alimentos y bebidas) y electrodomésticos son beneficiados. “Hasta el personal de los bancos usa la camiseta de Perú en los días de partido”, señala.
Época de vacas flacas
Nayhua añade que en las confecciones se genera toda una cadena de valor. En 2018, por la gran demanda, se contrató más personal, como vendedores y operarios. Incluso algunos pedidos se tuvieron que encargar a otros talleres. Se estima que cada negocio vendió cerca de 5 mil camisetas, muchos crearon sus marcas propias, por ejemplo, Nayhua tiene la firma Presea.
No obstante, Qatar 2022 sucederá en un contexto de inflación global. El economista Glenn Arce sostiene que el componente emocional es difícil de erradicar y que, por vivir la euforia de una probable clasificación, la gente seguirá consumiendo. “Cuando uno está feliz va a gastar y ve la forma de conseguir la plata”.
Quintanilla estima que la compra de camisetas y consumo de alimentos no debería afectarse, pues no representan gastos elevados. La camiseta más económica de Perú en los locales de la “Gamarra de Arequipa” se vende en 28 soles (la camiseta oficial cuesta sobre los 200 soles). Dónde sí podría haber una disminución, refiere Quintanilla, es en la compra de televisores, pues son gastos más fuertes.
Van calentando
El partido decisivo para Perú será el 13 de junio en Doha (Qatar), ante Emiratos Árabes Unidos o Australia. Como preparación, una semana antes, la selección de Ricardo Gareca jugará un amistoso ante Nueva Zelanda.
Los confeccionistas también se alistan a su manera para el trascendental encuentro. Graciela Nayhua refirió que algunos ya se proveyeron de tela, pues el insumo puede seguir al alza o escasear. Incluso en los últimos meses no hubo suficiente tela para atender los pedidos escolares y otros insumos importados como tintas se encarecieron por la coyuntura internacional.
Los microempresarios también hacen el aliento. Por ejemplo, para los últimos partidos de la eliminatoria, los comerciantes realizaron un banderazo por las calles Deán Valdivia y Pizarro, para así incentivar las ventas. Si el equipo de todos logra la hazaña, confeccionarán una camiseta gigante.
