En su discurso de la semana pasada ante el Congreso, el presidente Pedro Castillo volvió a poner en agenda la masificación del gas natural de Camisea. Ahora se refirió a siete regiones del centro y sur del país que se verían beneficiadas. Pero la expectativa entre autoridades es cautelosa, pues no se trata del primer intento por llevar el recurso a las provincias, que ahora se concentra en 88% de hogares de la capital.
El presidente habló de un sistema de ductos con dos sedes principales: Cusco y Ucayali, desde donde se abastecería a otras regiones altoandina: Ayacucho, Huancavelica, Junín, Apurímac y Puno. El anuncio releva al proyecto Siete Regiones, que planteaba una concesión de masificación en dichas jurisdicciones, sin embargo, la convocatoria para su realización quedó desierta en varias oportunidades, la última en junio del 2021.
La iniciativa gubernamental depende de un proyecto de ley presentado en noviembre del año pasado ante el Congreso y que recién -de forma coincidente- el martes 15 de marzo obtuvo dictamen, con algunas modificaciones, en la Comisión de Energía y Minas. Luego deberá pasar al pleno.
El proyecto del Ejecutivo 679/2021-PE no solo favorecería al proyecto Siete Regiones, también a la continuidad del proyecto en Arequipa, Moquegua, Ilo y Tacna. La iniciativa legislativa plantea la participación del Estado en la construcción de la infraestructura de masificación del gas.
Un análisis realizado por la investigadora Marusia Ruiz Caro para el grupo Propuesta Ciudadana, sostiene que parte del retraso de la masificación, es que se dejó la tarea a las empresas privadas mediante la figura de Asociación Pública Privada (APP). Sin embargo, la masificación del gas domiciliario no parece una inversión rentable.
Para emprender estos proyectos de infraestructura, el proyecto de ley plantea utilizar parte de los recursos del Fondo de Inclusión Social Energético (FISE) y del Sistema de Seguridad Energética en Hidrocarburos (SISE). El proyecto no descarta la participación de APP o concesiones de la infraestructura de gas natural, sin embargo, sería a futuro. La participación principal del Estado, sería incentivar en inicio de conexiones de gas natural.
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Vale recordar que la masificación del gas natural en Arequipa, Moquegua, Ilo y Tacna; no avanza desde el 2020, luego que Naturgy dejara la concesión con cerca de 12 500 conexiones instaladas (el objetivo al 2022 era 64 mil domicilios). Desde entonces, PetroPerú asumió la administración de las conexiones para dar continuidad al servicio. Se conoce que desde la entidad también esperan luz verde a modificaciones al uso del FISE para expandir las redes.
Perú es uno de los países con menor nivel de masificación del gas natural en los hogares, con solo el 14% de uso en los domicilios nacionales (la mayoría en Lima). En Colombia llega al 72% de hogares, el 50% en Bolivia.
El año pasado, el expresidente de PerúPetro Aurelio Ochoa, no descartó que el Estado pueda hacerse cargo de la masificación del gas natural ante la ausencia de los privados.