A través de cuatro trasferencias bancarias y en menos de 8 minutos, Leonard Gomero Anccori, empresario de tecnología eléctrica, fue despojado de más de S/ 97.000 que tenía en su cuenta del banco BBVA.
El empresario entabló una comunicación telefónica a través de la banca móvil del BBVA con el fin de hacer el cambio de una cuenta corriente en soles a dólares, llevándose con la sorpresa que al mismo tiempo su dinero estaba siendo transferido a una cuenta del banco BCP, la cual figura con el nombre de una persona de apellidos Salazar Calderón.
La llamada duró aproximadamente 28 minutos, de los cuales, solo bastó 8 minutos para que los hampones cibernéticos trasladaran y retiraran el dinero del BCP.
El primero traspaso de dinero fue de S/ 28.746, pasado dos minutos se registró otro de S/ 27.985, sucesivamente uno por S/ 28.646 y finalmente otro de S/ 11.712 en los últimos 60 segundos.
Al percatarse del robo, el comerciante de cámaras de seguridad se comunicó de manera interna con una de las agentes del BCP y le indicaron que la cuenta ya había sido bloqueada, pero que segundos antes se había hecho el retiro de todo el dinero existente en la cuenta corriente.
“Es imposible cómo de una manera tan rápida se pueda retirar tanto dinero y sin trabas ni preguntas por parte del BBVA, cada 2 minutos se realizaba una trasferencia de más de 20.000 soles cada una, es algo insólito que no se sospeche ni se haga una llamada para cerciorarse que era yo. Y lo más increíble es que pasado 2 minutos del saqueo, bloquean la tarjeta y ya habían retirado el dinero de la cuenta del BCP, es ilógico cómo tan rápido se pudo hacer ese movimiento”, detalla el empresario afectado por el robo.
“Cuando uno va al banco se demora mínimo 5 minutos para retirar, pero en ese caso fue en menos de 2 minutos, es como si la cajera al recibir el monto lo retiró de manera automática”, se queja.
El banco Continental le indicó al comerciante que habían recibido su reclamo, pero que tenía que esperar los 30 días hábiles para que le den una respuesta por lo que sucedió.
No conforme con ese descargo, Gomero decidió a asentar una denuncia en la oficina de informática de la Policía Nacional del Perú, quienes le indicaron que trabajarían en el caso para poder recuperar su dinero.