Redacción Norte
Los precios de los alimentos se han empezado a incrementar en el mes de julio, lo que supone la primera subida tras el levantamiento de la cuarentena en las regiones del norte, después de las bruscas caídas provocadas por la pandemia de la COVID-19.
En medio de la continua incertidumbre de la economía, los precios del pescado y el pollo repuntaron en precios, sobre todo este último que tuvo descensos pronunciados en mayo y junio.
En Piura, Guadalupe Córdova, dirigente del mercado Modelo de Piura, indicó que desde hace 10 días, el precio de pollo variaba entre 3 a 4 soles al por mayor. No obstante, desde los últimos días llega hasta S/.9.50 por kilo en la región.
Las amas de casa son las más perjudicadas, puesto que el precio al por menor oscila entre 12 y 13 soles por kilo, lo cual viene agravando en mayor medida la canasta familiar de los piuranos.
“Queremos que de cualquier manera haya una evaluación en esta alza que nos perjudica a todos, más aún en esta crisis que nos viene afectando a todos'‘, sostuvo una de las comerciantes del mercado de Castilla.
En la región Lambayeque, el precio del pollo se desplomó hasta venderse a 4 soles el kilo (entero) y S/ 6.00 el kilo de trozado, entre marzo y junio de este año.
Sin embargo, desde la semana pasada, las amas de casa están preocupadas porque el costo del alimento se incrementó, hasta llegar ayer a S/11.00 el kilo de pollo trozado y S/ 9.00 el kilo de pollo entero.
Al respecto, este diario conversó con Carlos Iberico Osorio, empresario avícola lambayecano, quien indicó que alza de precios se debe a una disminución en la oferta de pollo en los últimos días.
“Durante la cuarentena hubo un exceso de oferta de pollo porque los restaurantes y pollerías cerraron, y solo se distribuían el alimento en los mercados de la región”, explicó.
En Trujillo, tras el levantamiento de la cuarentena los compradores han acudido con mayor fuerza a los mercados.
Francisco Huerta Benites, presidente del Instituto de Economía y Empresa (IEE), refirió que no es viable que los comerciantes elevan el costo de los abarrotes o de las carnes debido a que no existe un agravante para dicha acción.
“Hoy la demanda de los usuarios es baja y no habría razón para que suban los precios, podría ser parte del comportamiento de los suministros de recursos o una especulación de los comerciantes”, indicó.
Huerta refirió que el reinicio de actividades de los restaurantes no tendría que ser motivo para que los precios aumenten, ya que la adquisición de productos por parte de éstos será reducida
En tanto, Iberico también alertó una especulación de precios, debido a que los productores de pollos no aumentaron sus precios.