Liz Ferrer Rivera
Tacna
“A mí me sorprende que Perú es el único país que impide a sus connacionales ingresar a su país. Eso es una violación a los derechos humanos (...) Nosotros aquí en Arica, por ejemplo, hemos gestionado para que retornen estudiantes chilenos varados en Bolivia”, declaró preocupado el alcalde de Arica, Gerardo Espíndola Rojas, respecto a la situación de los peruanos varados en su ciudad.
Desde el cierre de la frontera con Chile, el 19 marzo, han sido varios los reclamos e intentos de los compatriotas que están en Chile por volver al Perú. El consulado peruano en Arica gestionó un vuelo humanitario que trasladó a 148 personas.
Espíndola brindó ayer una entrevista a un medio radial, donde detalló que se tiene un registro de 600 peruanos albergados en un recinto municipal, pero él estima que hay más de mil peruanos en la misma condición en su ciudad. Calculó que el 70% de extranjeros varados en Arica son de nacionalidad peruana.
El alcalde envió una carta a la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, narrando la situación de los peruanos. “Son 50 días que están las personas varadas, en una angustia terrible para poder ingresar a su país. Y tuve respuesta, les pedí que mediaran para que se hablara con el Gobierno del Perú para que ellos (peruanos) regresen a su país con todas las medidas de seguridad que correspondan”, sostuvo el alcalde.
La autoridad municipal calificó de indigno que un grupo de peruanos durmiera por varios días en las calles. Afirmó que es una situación bastante dolorosa la que pasan los varados lejos de sus familias, así tengan un hospedaje garantizado.
Por su parte, el consulado del Perú anunció que, en coordinación con las autoridades chilenas, se hará cargo de la movilización de los compatriotas a la frontera para su ingreso al Perú. La sede diplomática aclaró que esa movilización se realizará cuando se abra la frontera. No hay ningún empadronamiento especial, ni cobro, ni entrega de dinero a los connacionales.
El traslado humanitario se realizará cumpliendo los protocolos sanitarios vigentes. Por ahora, la Cancillería continúa brindado hospedaje y alimentación, en la medida de sus posibilidades, a alrededor de 600 peruanos alojados en hoteles.