Según advirtió la nutricionista Ximena Chávez Alonso, existe un considerable porcentaje de adultos mayores que se ven afectados por una mala alimentación y a consecuencia de ello presentan una severa desnutrición.
“El adulto mayor es una persona en riesgo de desnutrición debido a una serie de cambios fisiológicos propios de esta etapa, las cuales disminuyen el apetito, las porciones de los alimentos y la absorción de los nutrientes”, indicó la especialista.
De acuerdo a la experta, también hay una deficiencia prolongada de vitamina D, la cual está asociada con reducción del tejido y debilidad muscular, lo que sumado a alguna enfermedad degenerativa o crónica pone en riesgo la vida de los adultos mayores.
Para la licenciada Ximena Chávez los principales signos de alerta que deben tener en cuenta los familiares de aquellas personas de avanzada edad, es la pérdida de peso y evidencia pérdida de tejido muscular como también de tejido graso.
“Entre otras evidencias tenemos las uñas con estrías transversales por déficit de proteínas, edema en piernas, pelo quebradizo por el déficit de proteínas y ácidos grasos, labios con fisuras y con queilosis por déficit de vitamina B2, lengua con glositis por déficit de vitaminas del complejo B, ojos con la conjuntiva enrojecidos, piel con sequedad o descamación y despigmentación, palidez por presencia de anemia”, informó.
Ante ello, se recomienda tener cuidado con la alimentación de los adultos mayores, así como incluirlos en alguna actividad.