¿Qué estaremos pagando con estos congresistas penosos?,La calidad penosa de algunos congresistas debe ser expresión de que los peruanos estamos pagando algo muy malo. Dos ejemplos recientes. Desde que se hizo famoso al decir que leer mucho produce Alzheimer, Bienvenido Ramírez no ha parado de consolidar su prestigio de ignorante. Como anteayer cuando, en el debate en la comisión de salud sobre el uso medicinal de la marihuana, proclamó que esa iniciativa es “una fachada de los narcotraficantes”. Peor estuvo Maritza García, a quien ni la responsabilidad de presidir la comisión de la mujer y familia del congreso la previno de graduarse de gran salvaje en la defensa de los derechos básicos de las personas que debería contribuir a proteger. Justo cuando el país concentra su atención en las agresiones a las mujeres por parte de sus parejas, García justificó el feminicidio: “Lo que el gran psicólogo y maestro dijo es que la mujer, sin razón o sin querer queriendo, da la oportunidad al varón para que se cometa ese tipo de actos. Muchas veces puede haber un agresor que es absolutamente sano y, de repente en un momento, la mujer lo saca de contexto diciéndole ‘me voy o te estoy traicionando’. Esas palabras, esas frases, nunca deben ser usadas por una mujer porque podrían, sin querer queriendo, motivar o exacerbar los ánimos de una persona normal”. Ayer, cuando se reveló que ‘el maestro’ que citó había sido acusado de tocamientos indebidos a menores, Maritza García dijo que habían sacado su comentario fuera de contexto. Lo que su partido debería hacer es, por decencia, sacar a esta justificadora del feminicidio de la presidencia de la comisión de mujer y familia. García y Ramírez son de Fuerza Popular. El problema de FP es que, por haber metido tantos congresistas, se le ha colado mucha gente como ambos pero, también, por citar solo a algunos otros, una falsificadora de certificados de estudios como Yesenia Ponce, o Alejandra Aramayo, a quien enviaron a sustentar un proyecto de ley contra la libertad de expresión teniendo denuncias de usar un medio en Puno para la extorsión. Se podría pedir que se eleven los requisitos para ser congresista, pero eso sería antidemocrático. Lo correcto es exigir más responsabilidad a los partidos al conformar sus listas, aunque eso sea pedirle peras al olmo. Con gente como esta se debilita el planteamiento de la muy conveniente bicameralidad, porque con una o con dos cámaras, poco puede salir bien con parlamentarios que demuestran que, peor que un ignorante, es un ignorante con iniciativa.