El mamarracho de denuncia contra ministra de Educación.,Criticar a otros medios no es un asunto usual de esta columna, pero la patraña contra la ministra de educación justifica la excepción pues no es un error periodístico sino una maniobra política como la prensa chicha del fujimontesinismo. Criticar a otros periodistas es propio de altaneros huachafosos que se sienten capataces o jefes de recursos humanos de cuanta redacción haya. Pero también es tonto porque, en este oficio, el tropezón está a la vuelta de la esquina, como en la casa del jabonero, donde el que no cae, resbala. Hay, sin embargo, errores que no lo parecen pues tienen el tufo a maniobra, especialmente si al día siguiente, cuando ya fue demostrado el traspié, se insiste, que es lo que ha hecho el diario Exitosa, con la colaboración entusiasta de los espacios radiales del mismo grupo, a propósito de la beca solicitada por el hijo de la hoy ministra de educación Marilú Martens. El lunes, Exitosa publicó su primicia en portada: “Hijo de ministra en Beca 18”. El mismo día se demostró que la ‘denuncia’ era un tremendo mamarracho: el hijo mayor de edad no postuló a Beca 18 (para personas pobres) sino a la beca presidente (para posgrado, con otras características), cuando su madre no era ministra, ni había una incompatibilidad y, al final, no le dieron la beca. En resumen, todo era mentira. Un error lo puede cometer cualquier medio, pero si al día siguiente no hay rectificación sino ratificación, y va con el titular “Piden renuncia de la ministra”, y aparecen los políticos jugando en pared y en complicidad, pues a la maniobra se le ve el fustán. Eso es lo que hacía la prensa chicha del fujimontesinismo, y eso es lo que parece que están haciendo ahora los políticos que pueden estar defendiendo a una universidad afectada por Sunedu, a la cucufatería de la ideología de género, o a la desestabilización de la oposición naranja. Entonces sale el Apra con Mauricio Mulder y Mercedes Cabanillas; Yonhy Lescano de AP, que no se puede perder ningún barullo; pero, principalmente, el fujimorismo, con, entre otros ‘amautas’, su secretario general José Chlimper, Lourdes Alcorta, Alejandra Aramayo y Rolando Sousa. Hay periodistas que no pueden despegarse de las taras en las que fueron diestros en la prensa chicha del ‘Chino’ o en maniobras para tumbarse al presidente de la transición democrática. Y políticos como los fujimoristas que, como lo hicieron en la última elección y que –digamos las cosas como son– explicó su derrota, no pierden ocasión para demostrar que la cabra siempre tira al monte.