El 1 de diciembre la Corte Internacional de Justicia emitió un fallo como respuesta al reclamo que realizó Guyana tras enterarse de que Venezuela planeó la realización de un referendo sobre el Esequibo —consulta que finalmente se llevará a cabo— pese a lo expuesto en el veredicto de la CIJ. En este se realizó una recomendación que, si bien es cierto, no fue del todo específica, sí se pudo tomar como una sugerencia de no realizar el plebiscito.
En una conferencia de prensa, Joan E. Donoghue, presidenta de la Corte Internacional de Justicia, leyó su dictamen en el que, entre otras cosas, sugirió lo siguiente: "Hasta tanto se produzca una decisión definitiva en el caso, la República Bolivariana de Venezuela deberá abstenerse de realizar cualquier acción que modifique la situación que actualmente prevalece en el territorio en disputa, mediante la cual la República Cooperativa de Guyana administra y ejerce control sobre dicha área”. Además, agregó que tanto Guyana como Venezuela "deben abstenerse de tomar acciones que puedan agravar o prolongar el litigio ante el tribunal o dificultar su resolución”. Pese esto, este domingo los venezolanos tendrán que participar del referendo organizado por el CNE.
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El presidente venezolano, Nicolás Maduro, quien ha puesto mucho empeño no solo en realizar el referendo, sino también en envolver de propaganda política al plebiscito, llegando incluso a crear un Comando Campaña 'Venezuela Toda' con el objetivo de promover la defensa de la soberanía sobre la Guayana Esequiba", aseguró que “llueva, truene o relampaguee habrá referendo consultivo el 3 de diciembre”; es decir, no seguirá las advertencias de la CIJ.