Tras una derrota inminente, frenada por una sentencia judicial, el chavismo puso en marcha todo su andamiaje para sostener aún el control sobre el estado de Barinas, lugar en el que nació Hugo Chávez, convertido en centro de la política de Venezuela con las elecciones a gobernador de este domingo.
El valor de Barinas va más allá del simbolismo de ser la tierra de Chávez. Está su potencial agropecuario y petrolero y su cercanía fronteriza con Colombia, con zonas donde activistas denuncian la movilización de irregulares armados. El proceso convoca a 607.000 de sus 870.000 habitantes.
Además, 2022 es un año en el que la oposición podría intentar un referendo para revocar el mandato de Nicolás Maduro.
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El CNE se pronunció en una breve comparecencia de prensa.
En Barinas se están repitiendo las elecciones regionales, tras conocerse que el candidato opositor Freddy Superlano, quien estaba por encima en el resultado con el candidato de Gobierno Argenis Chávez, se encontraba inhabilitado.
Ante la repetición de este proceso electoral, el Consejo Nacional Electoral (CNE) hizo algunas excepciones para la inscripción de candidatos, como es el caso de Jorge Arreaza, quien en los comicios de noviembre votó en Caracas, pero se le permitió registrarse como aspirante en Barinas por el PSUV (Partido Socialista Unido de Venezuela), lo mismo que con el opositor Claudio Fermín de Soluciones para Venezuela.
Además, se postuló Sergio Garrido por la coalición de partidos de oposición Mesa de la Unidad Democrática (MUD), Adolfo Superlano, del partido Movimiento al Socialismo (MAS), y Jesús Linares, representante del Movimiento Republicano.
Inicialmente, eran siete candidatos, entre ellos, los independientes Jesús Macabeo y Pedro Díaz, quienes renunciaron.
Según sondeos de diciembre de la encuestadora privada Delphos, el 75% de los barineses considera negativa la situación en este estado, gobernado desde 1998 por familiares del fallecido presidente socialista.
Y en medio de ese descontento, hay temor a represalias. “No me grabes, tengo mi finquita y después lo andan buscando a uno”, pide al equipo de la AFP un agricultor.
El director de Delphos, Félix Seijas, subraya que un triunfo de la oposición está cuesta arriba y que lo sucedido en noviembre puede “inhibir” a sus votantes.
“No pueden permitir un triunfo opositor en un estado muy importante para el chavismo, porque alimentaría la narrativa de que el chavismo no es todopoderoso”, comentó.