Rusia ha enfurecido contra la decisión de Joe Biden de permitir a Ucrania el uso de misiles estadounidenses de largo alcance contra objetivos militares dentro del territorio ruso. El kremlin ha acusado a Estados Unidos de reavivar el conflicto y aumentar la tensión de la guerra.
Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, aseguró que Estados Unidos está "echando leña al fuego" y provocando un aumento de la tensión. En un comunicado, Moscú afirmó que un ataque con un misil será considerado una agresión de EE. UU. y no de Ucrania. El senador Andréi Klishas advirtió que la decisión de Occidente podría dejar a Ucrania en ruinas, mientras que Vladímir Dzhabarov, vicepresidente de la Cámara, consideró que esta acción podría ser un "gran paso hacia el inicio de la Tercera Guerra Mundial".
La decisión de Biden permitiría a Ucrania atacar al ejército ruso en su propio territorio con misiles —difíciles de interceptar debido a su alta velocidad— de alcance de hasta 300 kilómetros. El presidente Vladimir Putin se ha mantenido en silencio hasta el momento.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dio luz verde a Ucrania para utilizar misiles de largo alcance fabricados en su país contra objetivos militares en Rusia, según información confirmada a la AFP por un alto funcionario en Washington, quien prefirió mantener el anonimato.
La autorización se produjo tras un reciente ataque aéreo masivo por parte de Rusia, que impactó severamente la red eléctrica ucraniana, resultando en al menos 11 fallecidos y la implementación de cortes de energía en el país. La repentina decisión de Biden también responde al reciente despliegue de tropas norcoreanas en apoyo a Moscú en el conflicto bélico, según reportes de medios como The New York Times y The Washington Post.
Joe Biden pidió a los líderes del G20 en Río de Janeiro apoyar la soberanía de Ucrania, tras autorizar a Kiev a usar misiles estadounidenses de largo alcance contra objetivos militares rusos. "Estados Unidos apoya firmemente la soberanía y la integridad territorial de Ucrania. Todos en esta mesa, en mi opinión, deberían hacer lo mismo", dijo Biden en su discurso tras la apertura de la cita, en presencia del canciller ruso, Serguéi Lavrov.
La decisión de Estados Unidos ha generado reacciones diversas en la comunidad internacional. Mientras que el ministro francés de Relaciones Exteriores, Jean-Noel Barrot, no descartó el uso de misiles de largo alcance por parte de su país, el ex primer ministro británico, Boris Johnson, instó a París y Londres a seguir el ejemplo de Washington. Johnson argumentó que esta acción debería haberse tomado hace tiempo para ayudar a Ucrania en su lucha contra la agresión rusa.
China, que se presenta como un actor neutral en el conflicto, ha pedido un alto el fuego y una solución política rápida. El portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores chino, Lin Jian, enfatizó la necesidad de calmar la situación lo antes posible.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, recibió con cautela la noticia de la autorización estadounidense, subrayando que las acciones concretas son más importantes que las palabras.