En el mundo de la nutrición y la salud, una fruta ha llamado la atención por sus propiedades únicas: el oro rojo. Además de su delicioso sabor, es una fuente rica de vitaminas, minerales, antioxidantes, flavonoides, fibra y potasio, lo que la hace un complemento nutritivo y una opción atractiva para aquellos interesados en una dieta saludable y equilibrada.
Con el paso del tiempo, esta fruta exótica ha destacado como un superalimento que puede contribuir a mejorar la elasticidad de la piel, reducir la inflamación muscular y mantener un equilibrio electrolítico adecuado, gracias a su rica fuente de potasio. Su consumo se ha asociado también con otros efectos positivos en el organismo.
Esta fruta es una fuente rica de vitaminas, minerales, antioxidantes, flavonoides, fibra y potasio. Foto: Jane Trang Doan
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La mora, conocida científicamente como Rubus idaeus, es una fruta que crece en diversas regiones del mundo, y que prospera en climas templados. Su parecido con la frambuesa no es solo en apariencia, las moras comparten con ella un alto contenido de fibra, con hasta un 6,6% por cada 100 gramos. Esta cualidad las convierte en una excelente aliada para la salud digestiva, ya que previene el estreñimiento y combate la atonía intestinal.
También es una fuente de vitaminas, minerales y otros micronutrientes esenciales para el organismo. Entre las vitaminas más destacadas se encuentra la vitamina C, de la cual una porción de moras cubre el 30% de las necesidades diarias recomendadas, según la Fundación Española de Nutrición (FEN). Además, contiene ácido fólico y vitamina E.
La mora, una fruta pequeña y deliciosa, se destaca por ser una catalizadora del colágeno. Foto: Goranh
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La mora se destaca por ser una catalizadora del colágeno, es decir, que estimula su producción en el cuerpo y, por tanto, beneficioso para la salud de la piel, los huesos y los cartílagos. Su contenido de agua y nutrientes clave puede favorecer la hidratación de la piel. Además, las semillas de las moras son ricas en ácidos grasos Omega 3 y 6, fundamentales para preservar la salud de la piel y prevenir el envejecimiento prematuro.
Lo que realmente hace destacar a las moras es su alto contenido de pigmentos naturales como antocianósidos y carotenoides, que poseen un gran poder antioxidante. Estos antioxidantes combaten la acción de los radicales libres, lo que ayuda a prevenir enfermedades degenerativas y proteger nuestro organismo. Un estudio publicado en la revista Nutrients incluso concluyó que las moras son la mejor fruta para mantener la salud de la piel, al prevenir la irritación, rojeces e inflamación.
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La mora contiene compuestos con propiedades antiinflamatorias, como las antocianinas y los taninos, los cuales pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. En ese sentido, puede ser beneficioso para diversas afecciones, como la artritis, el asma y las enfermedades cardíacas.
La mora no solo es beneficioso para la salud física, sino que también puede tener un impacto positivo en el bienestar emocional. Foto: Marcus Aurelius
A pesar de su pequeño tamaño, no solo contribuye a la buena salud física, sino que también puede tener un impacto positivo en el bienestar emocional. Algunos estudios sugieren que su consumo puede mejorar el estado de ánimo y reducir el estrés, gracias a sus propiedades antioxidantes y su capacidad para regular los niveles de azúcar en la sangre.
A continuación, te brindamos los beneficios más resaltantes de incluir la mora en la dieta diaria:
La combinación de antioxidantes, vitamina C y zinc presente en las moras refuerza el sistema inmunológico. Foto: Jane Trang Doan
El colágeno es una proteína esencial en el cuerpo humano, así como la más abundante en nuestros tejidos. Desempeña un papel crucial en la estructura y función de varios tipos de tejidos, como piel, huesos, tendones, ligamentos y muchos otros. Su importancia radica en su capacidad para proporcionar fuerza, soporte y elasticidad a estos tejidos, dependiendo de la forma en que se organice y se encuentre presente.