Una serie de intensas lluvias, que vienen azotando el estado sureño de Rio Grande do Sul, en Brasil, ya dejan al menos 56 muertos,74 heridos y 67 desaparecidos, de acuerdo con un nuevo balance brindando por la Defensa Civil de esta nación el último sábado 4 de mayo. Ese desastre, que ha dejado también a 356.000 personas sin energía eléctrica y 180 tramos de carreteras bloqueados, es catalogada como las más graves en el país en 80 años.
Las inundaciones también han afectado a la capital de Rio Grande do Sul: Porto Alegre, donde viven casi 1,4 millones de personas. Su río, el Guaíba, superó sus niveles y se inundó, por lo que se desbordó sobre calles y avenidas hasta en 5 metros en la mañana del sábado. Además, las estaciones de buses quedaron bajó el agua, esto ocasionó que el 95% de los viajes se suspendieran.
"Pese al gran esfuerzo de contención, el dique que represa el río Gravataí (…) empezó a desbordarse de nuevo. Las comunidades deben abandonar el lugar", advirtió desde la plataforma X el alcalde de Porto Alegre, Sebastião Melo, en referencia a otro de los ríos que surcan la ciudad.
El Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva declaró estado de calamidad debido a las graves lluvias que afectan a la zona sur del país. De esta manera, los estados perjudicados podrán solicitar recursos federales para acelerar el accionar de defensa civil, así como de asistencia humanitaria, restablecimiento de servicios esenciales y la reconstrucción de infraestructura.
PUEDES VER: El país de Sudamérica con mayores reservas económicas adecuadas, según el FMI: supera Brasil y Chile
De momento, la Defensa Civil declaró en estado de riesgo la mayoría de las cuencas fluviales de Rio Grande do Sul, las se encuentran en niveles de inundación. Por otro lado, el Gobierno federal envió 100 miembros de la Fuerza Nacional a dicha zona, donde ayudan con las operaciones de rescate y a las personas afectadas por las mismas.
Ante la situación, también se dispuso la suspensión indeterminada del aeropuerto Internacional de Porto Alegre.
PUEDES VER: Los 3 países de Sudamérica entre los mejores destinos culinarios del mundo: Perú ya no lidera el ranking
En el barrio de Navegantes, en la zona norte de Porto Alegre, José Augusto Moraes de Lima pedía ayuda a los bomberos para rescatar a un niño que quedó atrapado en su casa, puesto que un problema en la pierna le impidió llevarlo con él.
"De repente, en cuestión de minutos, en menos de una hora, se inundó todo. Perdí todo, televisión, guardarropas, cama, nevera, todo", relató angustiado el comerciante de 61 años a la agencia AFP.
El gobernador de Rio Grande do Sul, Eduardo Leite, dijo el sábado en una transmisión en vivo por Instagram que se trataba de una situación "dramática" y "absolutamente sin precedentes", consideradas como las más graves en 80 años en Brasil.