Helen Hewlett, una mujer inglesa de 44 años, realizó un depósito de 17.000 libras esterlinas a un sitio web utilizado para reclutar asesinos en un esfuerzo por quitarle la vida a su excompañero de trabajo, quien había decidido terminar la relación amorosa que ambos mantenían.
El Tribunal de la Corona de Norwich la condenó a siete años y medio de cárcel. Según se difundió, la mujer ingresó en un sitio de la web online de asesinos y aseguró en esa plataforma que “necesitaba a alguien muerto en Norfolk”.
El objetivo era asesinar a Paul Belton, de 50 años, quien decidió alejarse de Hewlett. Según su anuncio, la mujer planeó un supuesto accidente que acabaría con la vida de Belton.
Hewlett y Paul Belton se conocieron cuando trabajaban en la fábrica de alimentos congelados Linda McCartney en Fakenham.
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Hewlett obtuvo una serie de préstamos para pagar el asesinato, pero hasta el momento los investigadores no pudieron decir si el efectivo fue a parar a un sicario potencial o si el sitio del mercado de asesinos en línea era una estafa.
Asimismo, se le entregó una orden de restricción para el futuro que le impide acercarse a Belton o su familia.