El mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, se pronunció desde Brasilia. Esta es su primera manifestación pública luego de ser derrotado el domingo por Lula da Silva. El acto ocurre luego de dos días de protestas en las carreteras de varias regiones del gigante sudamericano.
En diciembre de 2018, el mes previo a la asunción de Bolsonaro como presidente, la inflación interanual de Brasil fue del 2,95%. En su primer año de mandato subió al 3,75%, mientras que en 2020 aumentó al 4,52%. En 2021, en tanto, la inflación interanual alcanzó las 2 cifras ubicándose en el 10%.
Según cita el diario Folha de Sao Paulo en 2018, al asumir la presidencia Jair Bolsonaro, Brasil se encontraba en el noveno lugar de las mayores economías del mundo. En tanto, en 2021 (último dato consolidado disponible) el país cayó al puesto 13. Para 2022 se espera que logre escalar posiciones.
Varios de los aliados del líder ultraderechista ya han dado por buenos los resultados, y miembros del Gobierno han entrado en contacto con el entorno de Lula da Silva para iniciar la transición, que culminará el 1 de enero con la toma de posesión.
Jair Bolsonaro perdió la contienda del domingo por un margen estrecho, al obtener el 49,1% de los votos por 50,9% de Lula, según la autoridad electoral nacional. Fue la carrera presidencial más reñida en el país desde la reinstauración de la democracia en 1985, y representa la primera vez que Bolsonaro pierde una elección en sus 34 años de trayectoria política.
El martes 1 de noviembre, el vicepresidente electo, Geraldo Alckmin, anunció que se encargara del proceso de transición. “Agradezco al presidente su confianza en la misión de coordinar la transición de gobierno. El trabajo de nuestro equipo se guiará por los principios de interés público, colaboración, transparencia, planificación, agilidad y continuidad de los servicios,” publicó en Twitter.
Con información de France24.
Esta fue la tercera vez que da Silva afrontó una segunda vuelta electoral. Así como en 2002 y 2006, ahora en 2022 volvió a ganar el máximo cargo del Estado brasileño. Será su tercera gestión como jefe de Estado con un congreso de mayoría opositora (Partido Liberal).
Con biblias en las manos y arropados con banderas meneantes de Brasil, grupos de camioneros, simpatizantes del presidente Jair Bolsonaro, bloquearon este martes varias carreteras en el país con un pedido: "Intervención militar ya".
Con información de EFE.
"El presidente Lula estimuló mucho las autocracias y las dictaduras de la región, el socialismo del siglo XXI, los grupos violentos. Uno quisiera que eso ahora no se repitiera", dijo Alvaro Uribe en una breve rueda de prensa, tras participar en el foro "El otro cambio climático", organizado por la consultora Abeceb.
Con información de EFE.
Los cortes de ruta que se han visto en varias partes de Brasil han tenido efectos en los servicios de salud. De acuerdo a la BBC, algunos hospitales han recibido advertencias por la entrega de oxígeno que podría retrasarte y afectar a pacientes hospitalizados.
El líder de derechas, Jair Bolsonaro, se manifestó este martes tras dos días de un tenso silencio: “Los movimientos populares son fruto de indignación y sentimiento de injusticia por cómo se dio el proceso electoral”, afirmó el líder de derechas.
Los bloqueos de carreteras en varios estados de Brasil se acentuaron este martes por segundo día consecutivo, con numerosos camioneros y manifestantes simpatizantes al presidente Jair Bolsonaro, en las calles sin aceptar su derrota ante el izquierdista Lula da Silva.
“Nuestra robusta representación en el Congreso representa nuestros valores: Dios, patria y familia”, señaló Bolsonaro.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo que seguirá "cumpliendo los mandamientos" de la constitución, en su primer discurso tras perder las elecciones frente al izquierdista Lula da Silva, a quien sin embargo ni siquiera mencionó.
El mandatario ultraderechista "autorizó" el inicio del "proceso de transición" con el equipo de Lula, añadió por su parte el jefe de gabinete de Bolsonaro, Ciro Nogueira. Con información de AFP.
En un escueto mensaje, Jair Bolsonaro se pronunció tras su derrota. Sus palabras generaban expectativa debido a que no se tenía certeza de cómo se tomarían los resultados electorales.
Luego de 48 horas de tensión y silencio, el aún presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, llamó a la prensa para pronunciarse tras la derrota en los comicios electorales.
El ministro de Comunicaciones brasileño, Fábio Faria, ha dicho que se espera que el presidente y candidato derrotado a la reelección, Jair Bolsonaro, se pronuncie sobre el resultado de las elecciones presidenciales solo el martes.
“Debería hacerlo mañana (martes), ha ido a su casa a redactar el discurso y mañana (martes) debería hacer el pronunciamiento”, dijo a Reuters, y añadió que no sabe cuál será el contenido del pronunciamiento y que está “muy tranquilo y sereno”.
Un convoy de camiones que transportaba material del equipo de Fórmula 1 Ferrari fue bloqueado temporalmente el martes por una barricada de camioneros que se negaban a aceptar la derrota electoral de Jair Bolsonaro, a dos semanas del Gran Premio de Interlagos.
Imágenes de EPTV, una TV afiliada al canal brasileño Globo, muestran varios camiones cargados con contenedores de color rojo brillante con el famoso logotipo del caballo detenidos al costado de la carretera frente al aeropuerto de Viracopos, cerca de la ciudad de Campinas, en el estado de Sao Paulo (sureste).
Con información de AFP
Los bloqueos de carreteras en varios estados de Brasil se acentuaron este martes por segundo día consecutivo, con numerosos camioneros y manifestantes favorables al presidente Jair Bolsonaro en las calles sin aceptar su derrota ante el izquierdista Lula da Silva.
La Policía Federal de Carreteras (PRF) reportó en la mañana más de 250 cortes totales o parciales en al menos 23 de los 27 estados brasileños.
"¡Lula no!", rezaba un cartel colgado encima de un viaducto en Sao Paulo, donde también estaban bloqueadas varias rutas, incluida la que une la gran metrólopis con Rio de Janeiro, impidiendo la salida de buses entre ambas ciudades.
Con información de AFP
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo el último lunes que conversó telefónicamente con el presidente electo de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, para "retomar la agenda binacional de cooperación", semiparalizada durante el gobierno de Jair Bolsonaro.
"Sostuve una buena conversación telefónica" con Lula, publicó Maduro en Twitter, un día después de la victoria del expresidente frente a Bolsonaro en la segunda vuelta de las elecciones brasileñas. "Acordamos retomar la agenda binacional de cooperación entre nuestros países. ¡Agradecemos su disposición!", agregó.
El presidente del Tribunal Superior Electoral de Brasil, Alexandre de Moraes, ordenó el "despeje inmediato de las vías", las mismas que estaban siendo bloqueadas por camioneros en contra de la victoria de Lula da Silva.
Así también, Moraes impuso una multa al jefe de la Policía Federal de Carreteras (PRF) de 100.000 reales por cada hora que continúe el bloqueo de pistas.
A los transportistas se han sumado ciudadanos de distintas profesiones que no aceptan los resultados de la segunda vuelta electoral.
Si bien estas no tienen un liderazgo ni reclamo específico, Janderson Maçanero, un camionero de Santa Catarina, declaró a la BBC que están a la espera de la posición del mandatario Jair Bolsonaro.
"Es la posición del presidente la que va a determinar el rumbo de las protestas. Estamos esperando que hable. O Bolsonaro va a la guerra, o desaparece de la escena política", señaló.
El actual vicepresidente de Brasil, Hamilton Mourão, se puso en contacto con el vicepresidente electo, Geraldo Alckmin. Este contacto entre ambas fórmulas se realizó a través de un mensaje de Mourão, quien afirmó ponerse a disposición para contribuir al proceso de transición.
De otro lado, si bien el primogénito de Jair Bolsonaro reconoció su derrota, hasta el momento el mandatario no se ha pronunciado públicamente.
“Bolsonaro hará un pronunciamiento en instantes en el Palacio de la Alvorada”, residencia oficial en Brasilia, informó la Secretaría de Comunicación de la Presidencia.
El anuncio se dará luego de dos días de tensión y silencio, y después de la victoria de Luiz Inácio Lula da Silva en las urnas por una diferencia ajustada (50,9% a 49,1%), que ya fue reconocida por numerosos líderes internacionales y por aliados del propio Bolsonaro.
Asimismo, el pronunciamiento coincidirá con el segundo día de bloqueos de carreteras de camioneros y manifestantes en todo el país para protestar y no reconocer el resultado electoral.
Los bloqueos de vías en varios estados de Brasil se acentuaron este martes por segundo día consecutivo con numerosos camioneros y protestantes —simpatizantes del mandatario Jair Bolsonaro— en las calles, que siguen sin aceptar su derrota ante el izquierdista Lula da Silva.
La Policía Federal de Carreteras (PRF) reportó en la mañana más de 250 cortes totales o parciales en al menos 23 de los 27 estados brasileños.
“¡Lula no!”, rezaba un cartel colgado encima de un viaducto en São Paulo, donde también estaban obstruidas varias rutas, incluida la que une la gran metrópolis con Río de Janeiro, y que impedía la salida de buses entre ambas ciudades.
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Con biblias en las manos y arropados con banderas de Brasil, grupos de camioneros, seguidores del presidente Jair Bolsonaro, siguen bloqueando este martes varias carreteras en el país con un pedido: “Intervención militar ya”.
Aunque la tendencia es a la baja, todavía hay más de 200 puntos con bloqueos totales o parciales activos en varios estados del país, incluidos los tres más poblados: Sao Paulo, Río de Janeiro y Minas Gerais.
Para detener esta “insurrección”, calificado así por un grupo de fiscales brasileños, la Corte Suprema tuvo que intervenir y dictar una orden que autorizaba a los gobernadores el uso de sus policías, ante la aparente inoperancia de la Policía Federal de Carreteras.
Ello ha permitido que en pocas horas hayan disminuido los bloqueos, aunque en algunos casos los manifestantes continuaron con sus protestas en los arcenes. Así ocurrió en la ruta que conecta Niterói con Manilha, en Río de Janeiro.
Con información de AFP