Un pequeño niño de cinco años curioseaba dentro de una juguetería ubicada en Hong Kong sin imaginar que una de sus travesuras terminaría costándole una fortuna a sus padres, de apellido Cheng. El pasado sábado 21 de mayo, el pequeño rompió un teletubbie gigante mientras jugaba en la tienda y su familia tuvo que pagar el importe total del artefacto.
Según lo informó Radio Mitre, el juguete, que medía 1,8 metros de altura, cayó al piso tras un breve impacto del niño y se rompió en varios pedazos. Tras el incidente, los directivos del local exigieron a los progenitores el pago del Teletubbie, abono que costó un total de 33.660 dólares de Hong Kong, equivalentes a 4.255 dólares estadounidenses.
Sin embargo, pese a haber efectuado el pago, los padres afectados exigieron una devolución del dinero y se quejaron de que el muñeco daba temor y había dejado a su hijo ‘traumatizado’.
Además, afirmaron que el incidente no había sido su culpa, puesto que el juguete había estado mal posicionado.
Lo sucedido fue grabado en un video que se volvió viral en redes sociales, plataformas en las que los usuarios mostraron su apoyo a la familia Cheng, adjudicando que el enorme Teletubbie había sido ubicado en una zona de paso y no contaba con ninguna barra o cinta de protección. Algunos internautas incluso acusaron a los vendedores de haber colocado el juguete en esa área ‘a propósito’.