Miles de millones de personas se preparan este viernes 24 de diciembre para festejar unas fiestas de Navidad nuevamente ensombrecidas por la pandemia de coronavirus, cuya variante ómicron ha provocado nuevas restricciones que afectan los reencuentros familiares.
Pese al endurecimiento de restricciones para prevenir contagios de COVID-19, en varios países ya están listos para celebrar una de las festividades más grandes del mundo.
Por segundo año consecutivo, cuando las vacunas parecían ofrecer un horizonte algo más esperanzador, el repunte de contagios lanzó un jarro de agua fría para las celebraciones de Sídney a Sevilla.
Tailandia se ha llenado de colorido para la Navidad. Foto: AFP
Pero en general, las celebraciones serán generalmente más distendidas que el año anterior, cuando apenas se empezaban a administrar las primeras vacunas. En Estados Unidos, millones cruzan el país para reunirse con sus familias.
Los australianos, los primeros en celebrar la Navidad, podrán en su mayoría viajar por el interior del país y reencontrarse con parientes por primera vez desde el inicio de la pandemia a pesar del récord de casos registrados.
“Todos hemos sido testigos de escenas conmovedoras de gente reencontrándose en aeropuertos después de meses de separación”, dijo el arzobispo católico de Sídney, Anthony Fisher, en su mensaje navideño.
“En un periodo tan sombrío, Navidad es un rayo de sol, un fragmento de esperanza”, agregó.
Para el primer ministro británico Boris Johnson, un certificado de vacunación sería el mejor regalo a pies del árbol.
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“Aunque el tiempo para comprar regalos ya ha terminado teóricamente, hay todavía una cosa maravillosa que pueden ofrecer a su familia y a todo el país y es obtener esta dosis, sea la primera, la segunda o el recordatorio, para que las fiestas del año próximo sean todavía mejor”, declaró.
Hong Kong también será uno de los primeros territorios que recibirán la Navidad. Foto: AFP
En Moscú, en pleno periodo de tensión con los países occidentales por Ucrania, Vladimir Putin pidió a “Ded Moroz” (el Abuelo Frío, el Papá Noel ruso) que ayude a Rusia a llevar a buen puerto sus proyectos.
“Espero que no solamente nos traiga regalos, sino que también concrete los proyectos del país y de cada uno de sus ciudadanos”, señaló el presidente.
Tras un otoño de renovadas esperanzas por la vacunación, la aparición de la variante ómicron ensombreció el ambiente en muchos hogares.
Pero los cierres de fronteras no impedirán dar la vuelta al famoso trineo impulsado por renos. Canadá le ha abierto su espacio aéreo después de que presentase un certificado de vacunación y un test negativo, dijo el ministro de Transportes.
Con información de AFP