Este miércoles 1 de diciembre, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) confirmaron el primer caso de la variante ómicron en el estado de California.
Anthony Fauci, asesor médico jefe de la Casa Blanca, detalló que el paciente presentaba la pauta completa de vacunación, acababa de regresar de un viaje de Sudáfrica el 22 de noviembre y dio positivo una semana después, según recogió la cadena CNBC.
“El individuo está en cuarentena y todos los contactos cercanos han sido contactados. Hasta ahora ellos han dado negativo (…). Nos sentimos bien de que sus síntomas parecen estar mejorando”, señaló el científico.
Los CDC dijeron que la secuenciación genómica se llevó a cabo en la Universidad de California. El gobernador Gavin Newsom ha hecho un llamado a derribar el pánico, aunque declaró “alerta”.
“Deberíamos asumir que (la variante ómicron) también está en otros estados. No hay razón para entrar en pánico, pero debemos permanecer alerta. Eso significa vacunarse. Use una máscara en interiores”, tuiteó la autoridad.
La variante ómicron se identificó por primera vez en Sudáfrica hace una semana y ha sido designada como variante de preocupación por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los científicos aún no tienen datos concretos, pero —basados en el patrón de mutaciones de la nueva cepa— esperan que eluda al menos en parte la acción protectora de las vacunas actuales y que pueda ser más transmisible que delta, la cepa mundial dominante en la actualidad.
Estados Unidos está previendo pruebas más estrictas y requisitos de cuarentena para los viajeros internacionales que lleguen al país, incluida la realización de una prueba diagnóstica de COVID-19 un día antes de la salida, señalaron los CDC.
También se evalúa imponer pruebas diagnósticas obligatorias al llegar, e incluso una cuarentena obligatoria, independientemente del resultado de la prueba, informó el Washington Post.
Con información de AFP.