Lisa Murkowski, del estado de Alaska, se convirtió este viernes en la primera senadora republicana en pedir la dimisión del presidente saliente de Estados Unidos, Donald Trump, al que se acusa de haber instigado el asalto al Capitolio, el pasado miércoles, que provocó la muerte de cinco personas.
“Quiero que renuncie. Lo quiero fuera. Ha causado bastante daño”, dijo Murkowski en una entrevista con el diario Anchorage Daily News en relación al asalto violento de los seguidores de Trump al Congreso para interrumpir una sesión en la que los legisladores iban a certificar la victoria electoral del demócrata Joe Biden.
“Creo que debería irse. Dijo que no se presentará, no aparecerá en la toma de posesión (de Biden)”, aseguró la senadora en referencia al anuncio de Trump de que no participará en la toma de mando de Biden el próximo 20 de enero.
La senadora de 63 años y que ocupa un escaño en la Cámara Alta desde 2002 acusó al gobernante de no concentrarse “en lo que está pasando” con la pandemia de coronavirus, que ha dejado 21,8 millones de contagios y más de 368.000 muertes en Estados Unidos.
“O está jugando golf o en su Despacho Oval echando humo y arrojando debajo del autobús a todas las personas que le han sido leales y fieles, comenzando por el vicepresidente”, Mike Pence, dijo Murkowski al medio local.
La parlamentaria aseguró que Trump en realidad “no quiere quedarse”, pero no renuncia “por el título” y “por su ego”. “Necesita salir. Necesita hacer lo correcto, pero no creo que sea capaz de hacer algo bueno”, agregó la senadora.
Entre los senadores demócratas han sido mayoritarias las peticiones de dimisión o de un juicio político a Trump tras los incidentes del miércoles, pero Murkowski es la primera republicana de la Cámara Alta que pide su salida del cargo.
“Si el Partido Republicano se ha convertido en nada más que en el partido de Trump, sinceramente cuestiono si este es el partido para mí”, reflexionó.