Un oficial de 36 años de Reino Unido, identificado como Darren Triggs de 36 años, fue agredido por una mujer en estado de ebriedad. Él quedó paralizado y fue internado en un centro de salud.
Según informó el portal The Sun, el hombre tenía un coágulo de sangre en su columna vertebral cuando fue revisado por los médicos.
El hecho sucedió cuando el oficial estaba trasladando a la agresora a una estación policial. Cuatro días después del ataque, el agraviado empezó a sentir adormecimiento en sus piernas y pensó que tenía un ataque cardíaco.
Horas después, los colegas del uniformado le informaron a la pareja del agente que fue llevado de emergencia al hospital, debido a que se sintió paralizado del pecho hacia abajo y no podía caminar.
La esposa de Triggs, Rosie, señaló: “Ambos estábamos en estado de shock. A él le encanta ser policía y ayudar a los demás. Darren me mostró el moretón después de recibir la patada y, como no sentía dolor, lo olvidamos”.
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A pesar de que se va recuperando, aún los médicos no le han dado de alta desde el pasado 3 de diciembre del 2019 cuando fue internado. Ahora se encuentra recibiendo fisioterapia intensiva para que pueda moverse con una silla de ruedas.
En febrero del 2020, su esposa dio a luz a su tercer hijo en el mismo hospital donde se encuentra el oficial Darren. “Nuestras vidas se han puesto patas arriba. Los dos estábamos ocupados en el trabajo, pero nos sentimos muy emocionados de tener otro bebé”, indicó.