En el estado de Connecticut (EE. UU.), un bebé de seis semanas murió a causa del nuevo coronavirus. La información fue difundida por el gobernador del estado Ned Lamont por medio de Twitter.
“Nadie está a salvo de este virus”, escribió Lamont.
El funcionario explicó que el recién nacido fue llevado en estado de inconsciencia a un hospital a finales de la semana pasada y no pudo ser reanimado, según informó RT.
“Las pruebas confirmaron anoche que el recién nacido dio positivo por COVID-19. Esto es absolutamente desgarrador. Creemos que esta es una de las vidas más jóvenes perdidas en cualquier lugar debido a complicaciones relacionadas con el nuevo coronavirus”, expresó Lamont.
En Estados Unidos han confirmado 203 608 casos hasta este 01 de abril, mientras la cifra de muertes ha alcanzado un total de 4.476, según los últimos datos publicados por el Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins.
Según datos oficiales, 8.400 pacientes han logrado recuperarse de la enfermedad en el país norteamericano.
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El presidente estadounidense Donald Trump dijo que el martes 31 de marzo que el riesgo de coronavirus es claramente peor que el de la gripe regular, dando marcha atrás en todas sus declaraciones anteriores.
Trump afirmó en una conferencia de prensa en la Casa Blanca que “mucha gente” había sugerido previamente que el país debería dejar que el coronavirus siguiera su curso, al igual que la gripe estacional.
“Resístalo, no haga nada, solo resístalo y piense que es gripe”, dijeron, según Trump, quien ahora consideró: “Pero no es gripe. Es algo cruel”.