Piñera va perdiendo la batalla y los chilenos la vida en esta nueva jornada. Las protestas y manifestaciones en el país sureño no cesan y solo este domingo se han registrado ocho muertos, más de 244 personas detenidas por desobediencia del toque de queda y cerca de 600 por causar disturbios en las calles.
Los jóvenes han tomado la batuta en Chile y parece que están convencidos de que no se rendirán hasta conseguir la anulación del alza de los pasajes en el metro chileno, pese a que el presidente Sebastián Piñera anunció el congelamiento del incremento el día sábado y este domingo pasó como proyecto.
”Nuestros padres nos llamaban por teléfono llorando porque no saben qué va a pasar con nosotros en la calle. Nos piden que regresemos a casa. Ellos viven el síndrome postraumático de la dictadura. Nos quieren proteger porque dicen que somos muy jóvenes y no vivimos el terror de esa época de represión”, narra Alejandra, una joven de 21 años.
"Voté por Piñera y siento que me mintió. Hace dos años que perdí un trabajo estable y tuvo que salir mi mujer a trabajar porque cuesta llegar a fin de mes y es inevitable endeudarse. La gente está cansada”, explica con amargura Arturo junto a su joven pareja.
Y es que los manifestantes en su gran mayoría son jóvenes y adolescentes que arriesgan su vida sin importarles el toque de queda y la medida de estado de emergencia. Ellos se enfrentan contra el gobierno para erradicar la desigualdad que desde hace un par de años viene sumergiéndolos en la inestabilidad económica, y que para muchos los grandes artifices de esto serían Piñera y Bachellet.