Cargando...
Mundo

Muere Luis Álvarez, rescatista del 11-S que enfermó de cáncer tras noble labor en los atentados

Entre las ruinas y las azoteas de los edificios cercanos, Luis Álvarez pasó tres meses buscando sobrevivientes y restos de sus compañeros muertos. También reclamaba los derechos de quienes se sumaron a labores de rescate.

larepublica.pe
11-S

La metástasis aniquiló su vida. Luis Álvarez, el detective retirado de la Policía de Nueva York, Estados Unidos, murió este sábado por un cáncer colorrectal relacionado con las sustancias que aspiró durante los tres meses que permaneció buscando víctimas entre los escombros de las Torres Gemelas, luego del atentado del 11-S de 2001.

Hacía unas semanas, Luis Álvarez, de 53 años y origen cubano, había testificado ante una comisión del Congreso de Estados Unidos sobre los fondos de compensación destinados a las personas que primero respondieron al ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001 en el World Trade Center de Nueva York.

La noticia de su muerte fue anunciada por la propia familia a través de Facebook.

“Le dijimos al final que había ganado esta batalla por las muchas vidas que había tocado al compartir su batalla de tres años. Estaba en paz con eso, rodeado de familia. Gracias por darnos este tiempo que hemos tenido con él, fue una bendición”, se lee en la publicación.

“Cuando se enferman, se mueren. Yo he tenido suerte”, aseguró Luis Álvarez antes de ingresar de urgencia al hospital de Rockville, en Nueva York, Estados Unidos, donde finalmente falleció.

Luis Álvarez, quien fue diagnosticado con cáncer en 2016, deja una viuda y tres hijos, sus padres y tres hermanos. La familia le agradeció en su mensaje de despedida por el tiempo que tuvo para compartir con él.

El polvo, humo, productos químicos y tóxicos que emanaron de los escombros afectaron a bomberos, policías, obreros de la construcción y otros trabajadores de emergencia que actuaron tras lo ocurrido y muchos han sufrido, como consecuencia, problemas respiratorios, trastornos digestivos, cáncer de pulmón y otros tipos de cáncer.

Luis Álvarez estuvo tres meses buscando entre las ruinas de los edificios y las azoteas de los edificios cercanos supervivientes y restos de sus compañeros muertos.

En un principio, se estableció un fondo de 7.000 millones de dólares, que se ha quedado pequeño debido a la cantidad de reclamaciones existentes y a que no existe ningún mecanismo para agregar más aportaciones.

Una iniciativa legal quiere que el Congreso garantice fondos para las personas que acudieron a participar en el rescate para los próximos 70 años.

El fondo por el que Luis Álvarez y otros lucharon se creó meses después de los ataques del 2001 y estuvo inicialmente activo durante dos años, pagando más de 7.000 millones de dólares relacionados con las lesiones y muertes causadas por los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos.

“Este fondo no es un ticket al paraíso, es para proveer nuestras familias de cuidado. Todos ustedes dicen que nunca olvidarán. Bueno, estoy aquí para asegurarme de que no lo hagan”, había dicho Luis Álvarez.

Tras una sentida intervención ante el comité, sus miembros aprobaron el proyecto de ley y se espera que el próximo agosto llegue a la Cámara Baja del Parlamento para ser discutido.

Cerca de 3.000 personas murieron en los ataques orquestados por la organización terrorista Al Qaeda en el World Trade Center de Nueva York, en el Pentágono y cerca de Shanksville, en Pennsylvania, Estados Unidos, y todavía quedan por identificar unas 1.100 personas.

El jefe de los detectives del NYPD, Dermot Shea, expresó las condolencias de los colegas de Alvarez en el departamento de policía para el que sirvió. “Él ejemplificó el lema del NYPD ' Fiel hasta la muerte'. Una inspiración, un guerrero, un amigo... llevaremos su espada”, escribió en su cuenta de Twitter.

Por su parte, el comisionado del Departamento de Policía de Nueva York, James O’Neill, tuiteó:

“Nuestra familia del Departamento de Policía de Nueva York y todos los primeros intervinientes lloran cuando recordamos al Detective del Escuadrón de Bombas, Luis Álvarez, quien falleció esta mañana. Su fortaleza, mental y emocional, nos guió a todos, y prometemos nunca olvidar su legado, que era, simplemente, que otros hicieran lo correcto”.

Y John Feal, primer interviniente y vocero del 11 de septiembre, dijo que el martes entregó la placa de Álvarez al líder de la mayoría del Senado Mitch McConnell, como un símbolo de la importancia del fondo de compensación a las víctimas

Con información de EFE.