Por: Janet López G.
Karina Jordán hace su ingreso a ‘Los Vílchez 2’ como Ericka, personaje con el que por primera vez hace humor. Sobre ello, sus aspiraciones como actriz y su próxima boda con el también actor Diego Seyfarth conversó con La República.
Estás de regreso en la TV, en la serie ‘Los Vílchez 2’...
Sí. Soy la única de ‘Ven baila quinceañera’ que pasó a ‘Los Vílchez’ con un nuevo personaje. Ahora encarno a Ericka, una chica que viene a develar el pasado de Hamilton (César Ritter)y un poco a desestabilizar la quinta, aunque esa no es su intención.
Con este personaje exploras recién en la comedia.
Sí, casi siempre hago personajes dramáticos e incluso antagonistas, entonces sí, Ericka es el primer personaje cómico que hago en toda mi carrera. Con ella entro a la comedia televisiva, lo cual me encanta, además es un reto porque siempre es más difícil hacer reír que hacer llorar. Ya tenía ganas de trabajar con Ritter y de mostrar algo que no había podido hacer antes.
Con la llegada de las plataformas de streaming, ¿cuál crees que es el futuro de las producciones nacionales?
La gente necesita identificarse con algo que sea suyo. No es lo mismo ver una serie extranjera que una producción con tus actores. Pero también creo que ya es tiempo de hacer producciones no solo para nosotros, sino también para conquistar el mercado internacional. De hecho, ‘Princesas’ de Pro TV, serie en la que tengo un rol antagonista, está siendo concebida para salir afuera, así que es cuestión de tiempo que la tele comience a evolucionar.
¿Y cuáles son tus aspiraciones como actriz?
Me gustaría dirigir en teatro, hacia allá van mis retos y mis pasiones, pero todavía no me siento preparada. Me falta técnica, así que empezaría primero asistiendo. También quiero salir al mercado internacional. Tengo planeado irme como mínimo un año a México a buscar oportunidades, pero eso ya será para el 2021 porque este año Diego y yo tenemos proyectos acá.
¿Cuánto crees que cambie tu vida ahora que estás ad portas de contraer matrimonio con Diego Seyfarth?
Vamos a ver, porque nosotros ya convivimos hace 3 años.
¿Por qué se decidieron por el matrimonio?
Diego me lo pidió... No soy de las personas que soñaba con el matrimonio, pero cuando empecé con este proceso de la búsqueda espiritual, me di cuenta de que el matrimonio es un rito de transición. Nuestro paso por este mundo es espiritual y en nuestras vidas siempre pasamos por ritos de transición, solo que no le damos ese carácter sacro, cuando lo ves de esa manera, la boda religiosa tiene total sentido. También juega la chica que estudió en un colegio religioso, que creció en Lima, a la que no le cuesta ceder para hacer feliz a su familia, así que sí quiero entrar a la iglesia con mi vestido blanco, quiero vivir esa experiencia aunque suene superficial, quiero tener mi fiesta y mi gran noche en la que Diego y yo seamos los protagonistas. Igual, no será una boda de molde, sino una donde nos puedan ver a nosotros como somos. Además de la boda civil y religiosa, tendremos una ceremonia espiritual en la que nuestra psicóloga y maestra de meditación nos dará la bendición.
Anteriormente mencionaste que pasaste por relaciones tóxicas...
Sí, no me relacionaba de una manera saludable, buscaba mi identidad a través del otro, me faltaba autoestima y siempre que se terminaba me preguntaba ¿qué hice? No entendía por qué mis relaciones no pasaban del primer momento del enamoramiento. Pero no hay nada de qué avergonzarse. No nos sabemos querer bien porque en el colegio no nos enseñan a reforzar tu amor propio, tu identidad, más bien te llenan de prejuicios, de miedos y culpas. Ahora la responsabilidad está en nosotros, en cómo criar a nuestros hijos.