La modelo peruana Luciana Fuster fue duramente criticada en redes sociales tras descubrirse que varias de las prendas que promocionaba como parte de su exclusiva línea de ropa en Gamarra, en realidad pertenecían a la marca Shein. Una usuaria denunció el hecho públicamente en TikTok, y hasta el momento, la ex Miss Grand International no ha hecho ninguna declaración al respecto.
Tras el escándalo, su tienda ahora solo vende jeans, mientras que otros productos como carteras y correas han sido retirados. Además, el nombre de la marca ‘Luciana Fuster’ fue cubierto con bolsas de basura, según un informe de 'Amor y Fuego'. Sin embargo, lo peor estaría por venir para la exnovia de Patricio Parodi, ya que, según el experto en temas de consumo y excongresista Jaime Delgado, la modelo enfrentaría una millonaria multa de 2 millones de soles por “publicidad engañosa”.
En medio de la controversia que rodea a Luciana Fuster, el especialista en derechos del consumidor, Jaime Delgado, se pronunció sobre el caso a través de su cuenta oficial de TikTok. Según Delgado, el accionar de la modelo podría llevar a que Indecopi inicie un proceso sancionador en su contra por presunta "publicidad engañosa". Esto obligaría a que Fuster se pudiera enfrentar a una multa de hasta 450 UIT, lo que equivale a más de dos millones de soles.
"El Indecopi debería de actuar de oficio frente a este tipo de prácticas que lamentablemente se dan con mucha frecuencia y la gente no va a estar comenzando su propio proceso o denuncia. El Indecopi debería de hacerlo de oficio", señaló.
El experto aclaró que la influencer tiene la libertad de fabricar sus prendas en el país que considere conveniente. Sin embargo, recalcó que esta facultad viene acompañada de obligaciones legales que deben respetarse para garantizar la transparencia hacia los consumidores, como indicar el país de origen, responder por la calidad de los materiales y más.
Luciana Fuster aseguró semanas atrás que su línea de ropa es peruana, aunque su marca indica que incluye piezas importadas. Tras la denuncia de una clienta que halló una etiqueta de SHEIN en una de las prendas, la influencer no se ha pronunciado directamente, pero la página de su marca en Instagram agradeció al público por la acogida, ignorando las críticas.
“Queremos agradecer la increíble acogida que hemos recibido. Debido a la alta demanda, hemos tenido un poco de demora respondiendo los mensajes por WhatsApp, pero no se preocupen, ¡a todos se les contestará a la brevedad posible! Gracias por su paciencia y apoyo”, se lee en sus redes sociales oficiales.