Cargando...
Economía

Citi: La inclusión financiera se ha visto obstaculizada por los propios bancos

“Este ha sido un problema más de los bancos, que de sus clientes, esto quiere decir que el banco no esta ofreciendo un producto adecuado”, comentó el líder del del Grupo Global de Finanzas Inclusivas de Citi.

larepublica.pe
Inclusión financiera

A pesar de que la inclusión financiera mejorara en los últimos 6 años, —en Perú, entre el 2011 y 2017, esta paso de 20% a 40%—, aún falta mucho por hacer.

Así lo sostuvo, Jorge Rubio, líder del del Grupo Global de Finanzas Inclusivas de Citi, quien indicó una serie de barreras por las que la gente no accede a los servicios financieros.

En tal sentido, esta exclusión financiera ha sido alimentada por las propias entidades financieras. “Este ha sido un problema más de los bancos, que de sus clientes”, comentó Rubio.

Entonces, el principal motivo de una persona para no tener una cuenta dentro de una institución financiera, es que no posee los fondos suficientes para acceder a un producto. Asimismo, los costos (comisiones), son un limitante para los usuarios.

“Esto quiere decir que el banco no esta ofreciendo un producto adecuado”, añadió el vocero de Citi.

Otros factores mencionados fueron el de la distancia y la documentación que se requiere para acceder a un servicio.

En relación al acceso al crédito, en el 2019, el 40% de las personas en Perú realizó un préstamo, aunque de ese porcentaje, poco más del 10% lo hizo en una institución financiera, mientras que el restante lo hizo en una entidad informal.

Y, similar a las tendencias de endeudamiento, el uso de instituciones financieras para ahorrar sigue siendo bajo en la mayoría de los mercados, entre ellos el Perú.

Uno de estas diferencias abismales también se demuestra en la brecha de género existente, ya que solo existe poco más de 40% de hombres no bancarizados, mientras que hay más del 60% de mujeres no bancarizadas.

Consultado sobre qué se podría hacer para mejorar este panorama en el país, Rubio sostuvo que es necesario una alianza estratégica entre el Gobierno, en su rol como proveedor de infraestructura, así como los bancos, los cuales tienen que desarrollar mejores productos y servicios a bajo costo.