Christine Lagarde. Expresidenta del FMI y próxima presidenta del Banco Central Europeo.
La vida tuvo reservado el primer lugar para Christine Lagarde en todo momento. Nacida el 1 de enero de 1956 en París, es la primera de cuatro hermanos. Todos hombres.
Mucho antes de demostrar sus dotes en el terreno económico, practicó el nado sincronizado. "Aguanta el dolor y no te olvides de sonreír”, le repetía su entrenador. Dicha frase, sumada a la motivación de su padre, la llevaron a convertirse en campeona de Francia e integró el equipo nacional.
Pero el sueño deportivo se quebró a sus 16 años. La muerte de su padre hizo que Lagarde tuviera que buscar trabajo y aportar a la economía familiar. Al terminar la secundaria, obtuvo una beca en la universidad estadounidense Holton-Arms School.
Ya en 1981, Lagarde ingresó al estudio de abogados Baker & McKenzie de Chicago y en 1999 saltó de ser abogada a ser la directora. Medios extranjeros señalan que de haberse quedado en Baker & McKenzie, Lagarde habría obtenido una jubilación anticipada de casi 2 millones de dólares. Pero el camino para ella no había terminado.
En el 2007 se convirtió en la primera mujer en encabezar el Ministerio de Economía de Francia. “Una Ferrari”, era como la definía el aquel entonces presidente Nicolas Sarkozy. Su trabajo para salvar la crisis la convirtió en la “ministro de Economía del 2009”, según el Financial Times. En el 2011, Lagarde pasa a ser directora del FMI; un espacio históricamente de hombres donde aprovechó para promover la lucha feminista. Gracias a ella, el 44,7% de los puestos de trabajo hoy son ocupados por mujeres.
El próximo 12 de setiembre dejará el FMI para convertirse en presidenta del Banco Central Europeo; aunque en Francia muchos la ven como una primera presidenta en el 2022. Un asunto que ella esquiva por el momento. “Solo quiero tener nietos”, responde.
Ursula Von der Leyen. Nueva presidenta de la Comisión Europea.
En Francia fue bien recibida. En Italia, igual. Y es que para ambos países es digno de admirar que una mujer con siete hijos haya hecho una importante carrera política. Pero antes de todos esos comentarios, Ursula von der Leyen tuvo que superar los duros embates de la historia familiar.
Viene de la élite alemana, pero nació en Bruselas. Su padre Ernst Albrecht, era funcionario en la capital europea.
Amenazada la familia por la Facción de Ejército Rojo, Ursula se refugió en Londres para estudiar Economía bajo el nombre de Rose Ladson, una tatarabuela estadounidense de otra rica familia. Lamentablemente no llegó a terminar los estudios.
Luego se interesaría por la medicina y, en la universidad de Hannover Medical School llegaría a graduarse y a conocer a su esposo Heiko von der Leyen.
Entre 1988 y 1992, Ursula von der Leyen trabajó como médico asistente en la Clínica de Mujeres de la Hannover Medical School. Sin embargo, tendría que interrumpir ese trabajo, por el nacimiento de sus mellizas. En gran parte de la década del 90, se dedicó a su familia en Stanford, mientras su esposo era miembro facultativo de la universidad.
Ha sido persona de confianza de la canciller Merkel, convirtiéndose en la primera mujer en tomar el Ministerio de Defensa alemán después de haber desempeñado las carteras de Familia, Mayores, Mujeres y Juventud (2005-2009) y la de Trabajo y Asuntos Sociales (2009-2013).
Hoy se convertirá en la primera mujer en presidir la Comisión Europea y podrá hacerlo con total facilidad gracias a los idiomas que domina: francés inglés o alemán. Su historia la tiene preparada para enfrentar dichos retos.
"Mi madre siempre mencionaba cosas como: ‘¿Va a ir todo bien con el trabajo y los niños?’. Después llegó un momento en el que me relajé”, explica Von der Leyen.