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¿Cuáles son los utensilios que nunca debes guardar en el cajón de tu cocina?

Aunque solemos usar los cajones de las repisas de la cocina para guardar las ollas, los platos o la sartén, existen otros utensilios culinarios que debemos evitar tenerlos ahí.

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Conoce qué utensilios de cocina nunca debes almacenar en la estantería de tu cocina. Foto: composición LR/Hogarmania/El Confidencial

Los cajones de la cocina son muy útiles para almacenar los utensilios culinarios que solemos usar al preparar un guiso, una sopa o un postre. Por ello, es común ver las ollas, los platos, los cubiertos o la sartén dentro de estos pequeños armarios; sin embargo, puede resultar difícil organizarnos si contamos con pocas repisas. Para aprovechar mejor el reducido espacio, es importante saber cuáles son los artículos que nunca deberías guardar en las gavetas. A continuación, te contamos al respecto.

En la mayoría de los hogares, el tamaño de la cocina suele ser reducido, por lo que, para organizar mejor la habitación y mantener una buena higiene, muchos optan por añadir pequeñas repisas en las que se almacenan los utensilios culinarios que utilizamos. No obstante, no todos estos artículos deben estar en dicho lugar.

¿Qué utensilios culinarios no deberías guardar en los cajones de tu cocina?

El error más frecuente al usar los cajones de cocina es emplearlos para guardar el exprimidor, el tostador, la sandwichera u otro pequeño electrodoméstico. Estos ocupan gran espacio, por tanto, es recomendable posicionarlos en otro lado del ambiente. Así hacemos lugar para otros objetos culinarios que deben estar a la mano, como los cubiertos, el cuchillo o el cucharón.

La tabla de picar y la bandeja para servir comida se hallan en la misma categoría. Estos ocupan un espacio grande dentro de los cajones debido a su tamaño. Lo ideal es buscar otro lugar donde no estorben.

En los cajones de cocina deben guardarse los utensilios que más se emplean en el día a día. Foto: El Mundo

Otro elemento que no debe ser guardado en los cajones son los paquetes abiertos de comida, como galletas, sopas instantáneas, entre otros alimentos empaquetados. Esto causa la proliferación de bacterias o la aparición de hormigas y cucarachas dentro de las estanterías. Lo mejor es verter lo que sobra en un recipiente y almacenarlos sellados si no van a ser consumidos de inmediato.