¿Sabías que el cajón bajo el horno de tu cocina no sirve para guardar ollas? Conoce su verdadero uso
Todos los modelos de cocina cuentan con un cajón ubicado en la parte inferior del horno; sin embargo, este no sirve para almacenar ollas o sartenes, sino que cumple una función mucho más importante a la hora de cocinar tus alimentos.
¿Has visto que tu cocina tiene un cajón debajo de tu horno? Al igual que la estufa, probablemente lo has usado como almacén para guardar tus ollas, sartenes u otros utensilios de cocina, o quizás no te hayas percatado de su existencia; lo cierto es que esta sección de tu electrodoméstico cumple una función importante en la cocción de los alimentos que muy pocos conocen.
En ese sentido, te contamos para qué sirve este cajón ubicado en la parte inferior del horno de tu cocina.
El cajón ubicado bajo el horno de tu cocina no es un almacén. Foto: Freepik
¿Para qué sirve el cajón que está debajo del horno de tu cocina?
Muchos modelos de cocina cuentan con este mediano cajón en la parte inferior del horno; sin embargo, pocos conocen que esta parte del electrodoméstico sirve para conservar la temperatura de tu comida una vez sacado del horno.
Por ejemplo, si has preparado una pizza, un pollo al horno o una rica lasaña de carne, pero olvidaste poner la mesa y servir los refrescos, coloca la comida en el cajón debajo del horno. De esta manera evitarás que se enfríe.
El cajón debajo del horno de tu cocina sirve como 'calentador' de comida. Foto: La voz del muro
Otra función que tiene esta sección de la cocina es dorar los alimentos o terminar un proceso de cocción de tu platillo, lo que ayudará a darle una mejor textura sin que se queme demasiado.
Si solo quieres usar el cajón del horno como un almacén de tus utensilios de cocina, evita guardar algún elemento compuesto de papel, plástico o tela, ya que, al estar funcionando el horno, el cajón se sobrecalienta y podría ocasionar un incendio al entrar en contacto con estos materiales.
¿Por qué deberías meter un papel higiénico en tu refrigeradora?
Debido a la celulosa por la que está compuesto, el papel higiénico tiene grandes propiedades de absorción. Por eso, colocarlo en el refrigerador es una de las soluciones más rápidas y eficientes para hacer frente a los desagradables olores que puntualmente aparecen dentro de la nevera.
El método es muy sencillo: debes colocar el rollo de papel higiénico en un rincón y dejar que haga su función. En poco tiempo, tu nevera recuperará su ambiente original sin olores repulsivos. Para una mayor eficacia y si, todavía notas que dicho aparato huele mal, pueden colocarse dos rollos. Se recomienda cambiarlos en dos semanas para mantener los resultados.