Una enfermedad que podría prevenirse si se detecta a tiempo, con un sencillo examen de orina, es la cuarta causa de muerte en el Perú, según datos del Ministerio de Salud (Minsa). Inicia de manera silenciosa, afectando a los riñones, y generalmente los síntomas son percibidos cuando está en una etapa avanzada. Si las prácticas en torno a esta patología se mantienen tal como están en el país, sin un enfoque centrado en promover la prevención, será el segundo motivo de decesos para el 2050. Se trata de la Enfermedad Renal Crónica (ERC).
Así lo afirma el nefrólogo Alberto Ortiz, miembro de la Sociedad Europea de Nefrología y coordinador de la Red de investigadores de enfermedades renales en España. Ante los altos costos que implican los tratamientos para las personas que padecen ERC, en este país se implementan campañas de descarte gratuito. Conversamos con el experto sobre cómo prevenir esta enfermedad y también con un especialista para conocer el panorama en Perú.
“Los riñones tienen muchas funciones, pero habitualmente pensamos solo en una, que es la de producir orina. Esa es la función de eliminar toxinas, por eso cuando estamos intoxicados hace falta sustituirla con diálisis o trasplante”, explica Ortiz. Pero, este órgano también cumple otros roles importantes.
Los riñones producen vitamina D, un compuesto necesario para la salud de los huesos. Además, son los principales responsables de generar eritropoyetina (EPO), una hormona clave para el proceso de formación de glóbulos rojos que ayuda a prevenir la anemia.
“Tenemos la suerte de que tenemos pastillas que sustituyen a la EPO y a la vitamina D. Pero, los riñones también producen una hormona que no podemos reemplazar, retrasa el envejecimiento y se llama Klotho”, señala el nefrólogo.
El experto detalla que las personas con ERC tienen un envejecimiento acelerado, lo cual los lleva a una muerte precoz. “Esta función no se sustituye con la diálisis”.
La enfermedad renal crónica (ERC), también conocida como insuficiencia renal crónica, según la Organización Mundial de la Salud, es la pérdida gradual de las funciones de los riñones. “Cuando alcanza una etapa avanzada, niveles peligrosos de líquidos, electrolitos y desechos pueden acumularse en el cuerpo”, indica la información oficial de la entidad internacional.
Sin embargo, de acuerdo a Ortiz, la desintoxicación no es la única función de los riñones. La ERC es una enfermedad que recién se viene investigando desde hace 10 años, por lo que los nuevos hallazgos permiten un diagnóstico más temprano que años atrás.
Para diagnosticar, con las técnicas anteriores, se empleaba un análisis de sangre y una estimación de la función renal para eliminar toxinas. “Si nos fijamos en este último parámetro, hacemos el diagnóstico tarde”, precisa el nefrólogo. Ahora, es suficiente un análisis de orina.
“En el análisis de orina se detecta albúmina. Esta es la principal proteína de la sangre y no debería estar en la orina, pero cuando los riñones se dañan, la dejan escapar y se llama albuminuria”, detalla. Es posible identificar albuminuria varios años antes de que se detecte una ERC, por lo que permite un tratamiento más efectivo de prevención.
La albuminuria está relacionada con la producción de klotoh, que, según Ortiz, no era medida habitualmente. “Los tratamientos más modernos para enfermedad renal bajan la albuminuria. Por eso, es necesario hacer el énfasis en divulgar que existen tratamientos más modernos y hay que aplicarlos”, enfatiza.
Los niveles de albúmina pueden medirse mediante un examen de orina. Foto: Mayo Clinic
“Uno de cada 10 peruanos tiene alguna forma de insuficiencia renal crónica”, indica el doctor Cristian León, jefe del Servicio de Nefrología del Hospital Nacional Cayetano Heredia. Quienes tienen mayor riesgo de desarrollarla son pacientes diabéticos, personas con obesidad y personas con antecedentes familiares.
“Los esfuerzos en Perú, principalmente del Ministerio de Salud, se ha enfocado en garantizar el tratamiento recuperativo de la insuficiencia renal crónica a través de la hemodiálisis y el trasplante. Pero, a la vez, la accesibilidad de los pacientes a este tipo de terapias permanece limitada”, señala el nefrólogo.
Se estima que hay alrededor de 25.000 pacientes en hemodiálisis en Perú, según León. Pero, solo están registrados 18.000 para recibir algún tipo de diálisis. Quiere decir que hay miles de pacientes que no están recibiendo el tratamiento.
“En el Perú, las autoridades están enfocadas en el tratamiento recuperativo. En relación con el tratamiento preventivo, el único sistema que está haciendo algo al respecto es el Seguro Social de Salud (EsSalud). En este caso, a los pacientes de riesgo se les realiza una prueba de sangre y se mide la albuminuria”, expone el doctor peruano.
“Lo que vemos en el Perú es que los pacientes con insuficiencia renal llegan en un estado muy avanzado. Entonces, se presentan al centro de salud cuando ya necesitan una diálisis. Sería diferente si se detectara a los pacientes en etapas más tempranas”, comenta León.
¿Qué se hace en España? La Sociedad Española de Nefrología, junto con otras entidades sanitarias, han establecido que toda aquella persona mayor de 60 años y pacientes de riesgo deben conocer su ABCDE, que son las siglas de componentes que pueden indicar un diagnóstico precoz de ERC, incluyendo la albuminuria.
“Es más sencillo implementar la prevención universal de la albuminuria que luego enfrentar los altos costos por la necesidad de diálisis. Se puede ahorrar costos en el mantenimiento en el medio ambiente también, debido a los materiales que se usan para ello. Recordemos que la diálisis es un problema de la sociedad, grandes costos y grande impacto medioambiental”, enfatiza Ortiz.
De acuerdo al nefrólogo, lo que se recetaría para tratar la albuminuria e impedir que se desencadene la enfermedad renal crónica es una pastilla que requiere tomarse una vez al día: empagliflozina. "Comparada con la diálisis, que requiere asistir tres veces por semana a pasar la mañana o la tarde en el hospital, una pastilla resulta más amigable y se trata de un fármaco seguro", expresa.