Estudió en la UNMSM, UNALM y hoy a sus 32 años es una científica reconocida en EE. UU.: fue la única mujer en una expedición al Ártico
Ruth Quispe, actualmente, realiza una pasantía en la NASA, donde investiga nuevas técnicas para detectar vida fuera de la Tierra. Conoce más detalles en esta nota.
Ruth Quispe Pilco es una bióloga peruana cuya pasión por la ciencia la ha llevado a alcanzar metas impresionantes en el campo de la investigación. Desde sus primeros días en la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM), siempre tuvo un objetivo claro: aportar al desarrollo científico y convertirse en una referente. Su determinación la ha llevado a participar en proyectos de gran relevancia, como la búsqueda de vida en otros planetas y el análisis de microorganismos en entornos extremos.
A sus 32 años, no solo ha destacado por su trabajo en diversas universidades de prestigio, sino que también ha sido parte de expediciones científicas en lugares tan remotos como el Ártico, donde fue la única mujer peruana en representar a su país. Actualmente, realiza una pasantía en la NASA, lo que la convierte en un ejemplo de perseverancia y excelencia.
"Siempre he dicho que la meta es el camino para convertirme en una científica y obtener resultados que puedan ayudar a la población a cambiar la historia", expresó en una entrevista para Andina.
¿En qué universidades estudió?
Ella comenzó su carrera como bióloga en la UNALM, una de las principales universidades de ciencias en Perú, donde se formó en biología general. Posteriormente, decidió ampliar su conocimiento en biología molecular y cursó una maestría en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM).
Luego de ello, ingresó al doctorado en la Universidad de Colorado Boulder, en Estados Unidos. En esta institución, se especializa en ecología microbiana, centrándose en su investigación en los microorganismos que se desarrollan en ambientes extremos, como los que se encuentran en zonas desglaciadas.
¿En qué consistió su expedición al Ártico?
Uno de los hitos más destacados en la carrera de Quispe fue su participación en una expedición científica al Ártico, un entorno donde pocos tienen la oportunidad de trabajar. Esta expedición, que se llevó a cabo en agosto de 2023, fue organizada por un equipo de investigadores de Estados Unidos y Europa, y Ruth fue la única mujer y de nacionalidad peruana en formar parte de este grupo selecto. Durante los 12 días que duró la expedición, la bióloga se dedicó a tomar muestras de sedimentos y analizar cómo los microorganismos interactúan en un ambiente afectado por el cambio climático y la desglaciación.
El trabajo en el Ártico no solo le permitió profundizar en su línea de investigación, sino que también captó la atención de instituciones internacionales, como National Geographic, que le otorgó financiamiento para estudiar microorganismos en zonas altoandinas del Perú. Esta experiencia le ha brindado un conocimiento invaluable, el cual utiliza en sus investigaciones actuales sobre cómo el cambio climático está modificando los ecosistemas polares.
La bióloga Ruth Quispe tiene 32 años. Foto: Andina
¿Cómo logró realizar pasantías en la NASA?
Llegar a la NASA no fue un proceso sencillo para la peruana. A pesar de los desafíos que implica ser una científica extranjera en Estados Unidos, ella nunca abandonó su sueño de trabajar en la agencia espacial más importante del mundo. Fue a través de su red de contactos académicos, específicamente un tutor de la Universidad de Colorado, que encontró la oportunidad ideal para postular a una pasantía profesional (internship) en la NASA.
"Primero presenté mi CV, cartas de recomendación y rellené formularios. No es tan complejo como postular a un doctorado, pero sí es bastante competitivo", recordó Ruth para Andina. Para estudiantes extranjeros como ella, el proceso es aún más complejo, ya que se requieren permisos adicionales para trabajar fuera del campus y en territorio estadounidense. Finalmente, después de un año de trámites y preparación, fue aceptada en el programa, y comenzó su pasantía el 9 de septiembre de 2024 en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA.
Durante 10 semanas, se dedicará a investigar nuevas técnicas de detección de vida en ambientes fuera de la Tierra. Parte de su labor consiste en analizar moléculas en lugares como las lunas de Júpiter, lo que podría dar pistas sobre la existencia de vida pasada o actual en esos entornos.