Cayó un bailarín peruano con más de 1 kilo y medio de cocaína en el estómago
Sergio Mateo Aguirre Vernal, de 21 años, fue intervenido por la PNP en el aeropuerto Jorge Chávez cuando pretendía viajar a París. En lo que va del año han sido atrapados 20 burriers en el primer terminal aéreo.
Estaba nervioso cuando llegó al ‘body scan’ de salidas internacionales del aeropuerto internacional Jorge Chávez. El bailarín peruano Sergio Mateo Aguirre Vernal (21) pretendía viajar a París, Francia, pero transpiraba sin razón aparente. Al pasar el examen no invasivo de rayos X, los agentes antinarcóticos comprobaron sus sospechas: llevaba 49 cápsulas con 1.645 kg de cocaína en el estómago.
“Cuando cruzó el escáner se logró visualizar presuntos cuerpos extraños en la cavidad abdominal”, reveló un agente de la Dirandro.
Explicó que por disposición de un representante del Ministerio Público condujeron al intervenido al hospital Daniel Alcides Carrión, donde se procedió con el recojo de los 49 envoltorios tipo látex (preservativo), conteniendo cada uno de ellos droga tóxica. Las cápsulas fueron evacuadas vía rectal por el detenido.
Ahora es interrogado por agentes de la División de Investigación de Tráfico Ilícito de Drogas para determinar cuándo, donde y por quiénes fue reclutado para transportar la cocaína bajo esta modalidad.
Así los reclutan
Al respecto, agentes de la Dirandro indicaron que las mafias de narcotraficantes eligen jóvenes embarazadas de pocos meses porque los médicos se niegan a someterlas al examen delator de los rayos X.
También reclutan a personas adultas, porque su aspecto suele alejar sospechas y la edad les da una mayor capacidad torácica.
A ellos los entrenan durante una semana: los hacen tragar trozos de zanahoria, uvas congeladas y les prohíben beber lácteos o cítricos que los irriten.
Después de este entrenamiento, les dan las 50, 80 y hasta más de 100 cápsulas que deben llevar en el estómago.
A partir de entonces los nervios, los jugos gástricos y cada demora son un paso que acerca a la muerte. El riesgo de que una cápsula estalle es enorme, pero la necesidad de las personas parece serlo más.
‘Capsuleros’, ‘ingestados’, ‘tragones’ y ’encapsulados’ son los nombres más comunes que se les da a estos burriers.
20 burriers detenidos
De acuerdo a cifras oficiales de la Dirandro, en lo que va del 2023 han sido detenidos 20 burriers en el aeropuerto Jorge Chávez que trataron de sacar 45,795 kg de cocaína bajo distintas modalidades. De ellos, trece eran varones y siete mujeres. Uno era español, otro de Israel y dieciocho eran peruanos.
Las fuentes consultadas por La República revelaron que uno viajaba a Chile, otro a Israel, tres a Francia, cuatro a Italia y once a España.
"Es una forma de narcotráfico que ataca la dignidad humana y se aprovecha de la necesidad", dice un oficial de la Dirandro. "Es denigrante, pero cada vez se les recluta más", agregó.
Más allá de esto, lo que une a los ‘capsuleros’ es la pobreza. Uno de ellos recibe entre US$2.000 y US$3.000 por cada kilo de cocaína en Europa. La parte más peligrosa es la ingesta, ya que si se llega a romper una cápsula puede provocarle una muerte inmediata por sobredosis con solo estallar. Son pocos los que no lo logran.