Sociedad

Paciente con impotencia sexual exige devolución de 1.800 dólares a clínica en Trujillo

Dueño y especialista señaló que el cliente no respondió al tratamiento, por problemas de alcohol y diabetes.

Paciente llegó a la clínica para elevar su nivel de testosterona. Foto: composición LR/ difusión
Paciente llegó a la clínica para elevar su nivel de testosterona. Foto: composición LR/ difusión

Un ciudadano de iniciales I. M. reclamó, con carta notarial, a la clínica Zegarra que le devuelva los 1.800 dólares que pagó por un supuesto tratamiento para aumentar su testosterona, que incrementaría su potencia sexual.

El afectado relató que en junio acudió a este establecimiento médico, luego de ver una publicidad, y decidió someterse a las ‘bondades’ del ‘Chip de la juventud’, lo cual eleva su nivel de testosterona.

Según refiere en el documento, el mismo doctor Walter Zegarra lo convenció para colocarle 10 chips por un precio total promocional de 1.800 dólares, teniendo en cuenta que cada chip suele costar 300 dólares.

Zegarra

Zegarra

El paciente asegura que, pese a que pagó en efectivo, nunca le entregaron ningún comprobante.

“Me colocaron los 10 chips y me dio las indicaciones que tenía que seguir por un mes, y durante ese mes no me hizo efecto; a pesar de eso, me cuide un mes más, y no hizo efecto”, afirma el afectado, quien le exige, además, la devolución de su dinero en un plazo de 72 horas; de lo contrario, iniciaría acciones legales. La carta notarial fue entregada el pasado viernes 25 de noviembre.

Por su parte, el dueño de la clínica, Walter Zegarra, en diálogo con La República se defendió y dijo que el paciente es una persona dependiente del alcohol con problemas de diabetes, que no respondió al tratamiento.

“Le he puesto un producto que se llama Nicotinamida Adenina ha entrado como 5 veces en la cámara hiperbárica, le he colocado un antioxidante poderoso. Hasta ahí todo bien, luego le pongo unos chips porque su testosterona está tirada al suelo y le he puesto la dosis que se ha creído conveniente de acuerdo a su peso, pero al parecer en este caso no ha hecho ningún efecto”, comentó el médico.

Manifestó que su cliente es dependiente del alcohol, una persona que no se cuida y no quiere continuar con el tratamiento, porque solo está empecinado en que le devuelvan su dinero.

“El devolver el dinero implica aceptar un error que no se ha cometido y los productos que ya se usaron tienen un costo que ya se hizo”, finalizó.