Conflicto social dejó sin agua hace un mes a 5.000 habitantes
Cuajone. Comunidad campesina tomó el control del reservorio Viña Blanca y cerró la válvula al campamento minero de Southern. Afectados piden intervención del gobierno.
Moquegua. Hace más de un mes, la comunidad campesina de Tumilaca Pocata-Coscore-Tala inició una protesta contra Southern por la presunta usurpación de terrenos hace 50 años y promesas incumplidas. Ambas partes, a través de comunicados, mostraron su disposición para llegar a acuerdos. Sin embargo, hasta la fecha no hay una solución.
La comunidad alega hechos de violencia, daños y acciones de la minera que impiden el consenso. Por su parte, Southern denuncia el bloqueo en parte de la línea férrea que usa para el transporte de su mineral y la toma del reservorio de Viña Blanca que alimenta con agua a la mina, su campamento y población de Cuajone.
En medio del conflicto diversos derechos son vulnerados, en especial el del agua. De acuerdo a la Defensoría del Pueblo este fue reconocido como derecho humano por la Asamblea General de la ONU, y en el ámbito nacional en la Constitución fue incorporado desde el 2017.
Según la información otorgada por Elizalde Zeballos, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Toquepala y Anexos, son 5.000 personas las que se ven afectadas por el corte del servicio. De ese total, 1.800 son trabajadores dependientes de Southern que viven en el campamento junto a sus familias y otras son profesores, efectivos de la Policía Nacional, personal médico y demás que radican en la zona. Los niños también son perjudicados, unos 500 no pueden ir a clases por falta del recurso hídrico y algunos presentan enfermedades estomacales.
“Nos interesa que nos repongan el agua, si tienen que negociar entre comuneros y empresa que lo hagan, pero sin afectar los derechos de las demás personas”, sostuvo.
Posturas
El dirigente de la comunidad campesina, Iván Mendoza, señaló que ellos no son responsables del desabastecimiento del recurso hídrico. “Cuando Southern ve que la comunidad toma la laguna (Viña Blanca), ellos cierran la válvula de agua para que salgan sus trabajadores a protestar. Ellos la cerraron y ellos son responsables”, señaló.
Una versión distinta tiene Zeballos. “Southern no podría cerrar sus propias válvulas y a la vez comprar agua y traerla por medio de cisternas hasta Cuajone. Si ellos (comunidad) no cerraron la válvula que nos permitan ingresar a Viña Blanca, nosotras las abrimos y nos retiramos”, refirió.
No obstante, cuando este medio hizo extensiva la propuesta de Zeballos para la apertura de las válvulas por parte de los trabajadores, el dirigente Mendoza no la aceptó y se ratificó que ellos no habían manipulado nada. En todo caso, pidió que muestren cuánta cantidad iba para el consumo de la población y cuánta para la mina.
Por su parte, Southern advirtió, en una carta dirigida al Consejo de Ministros, que podría cerrar de forma temporal la mina de Cuajone .
Sobre la problemática también se pronunció el ministro de Energía y Minas, Carlos Palacios, quien sostuvo que están en proceso de elaborar un convenio. Además, señaló que viajarán a la zona, aunque no dio una fecha.
Conformación de grupo de trabajo
El Gobierno, mediante una resolución, anunció la conformación de un grupo de trabajo integrado por representantes de los ministerios de Energía y Minas, Desarrollo Agrario y Riego, Justicia y Derechos Humanos, Presidencia del Consejo de Ministros, empresa Southern y comunidad. En 10 días hábiles se reunirían para dar solución a la problemática.
La comunidad pide la presencia de Pedro Castillo en Viña Blanca, en tanto se reunirán en Asamblea General para ver si se acepta la resolución y cuáles serían las condiciones.