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Sociedad

Descubren red internacional de tráfico de animales en el Mercado Central

Las autoridades descubrieron cómo especies exóticas procedentes del norte del país y la Amazonía eran ofertadas en el jirón Ayacucho, en el Centro de Lima.

Gracias a la denuncia, una guarida con varios animales almacenados fue intervenida por agentes de la MML y de la PNP. Foto: captura de ATV
Gracias a la denuncia, una guarida con varios animales almacenados fue intervenida por agentes de la MML y de la PNP. Foto: captura de ATV

En las calles del Centro de Lima se encontraron a vendedores que llevaban a cabo el comercio de animales silvestres, una actividad ilícita pero millonaria actividad que motiva a varios ambulantes a ofertar al paso estas ventas de manera paralela y clandestina.

Las diversas especies comercializadas son llevadas hasta las calles del Mercado Central desde la Amazonía peruana y desde el norte del país. Este submundo tiene su epicentro en el jirón Ayacucho, calle conocida por tener una gran galería y varias tiendas de artículos para mascotas.

Como demostró el informe emitido por ATV, los loritos de cabeza roja de seis meses pueden llegar a costar S/ 260. Asimismo, las tortugas marinas a S/ 50.

Aunque muchos de los animales ofertados están camuflados entre los ambulantes en plena vía pública, otros contrabandistas de nuestra diversa fauna nacional están dispuestos a conseguir la especie requerida por los eventuales clientes una vez que la transacción sea segura. Para esto, no tienen problemas en dejar sus números telefónicos para posteriores comunicaciones vía WhatsApp.

El referido medio puso en evidencia a un vendedor ambulante de peces de colores en bolsas. El comerciante de nacionalidad extranjera no tenía los ejemplares solicitados consigo a primera vista, pero también se dedica al tráfico de animales exóticos.

“Monitos puedo conseguirte, pero es un poquito más delicado”, responde el joven al periodista infiltrado. Asimismo, le asegura que cuenta con monos de pelo rojo a una suma aproximada de S/ 500.

Estos traficantes de animales despojados de su hábitat natural realizan sus operaciones con cuidado, ya que son conscientes que su actividad está penada por ley. Una vez tienen a un comprador interesado, saben con quien derivarlo dentro de su red.

A causa del informe televisivo, agentes de la Municipalidad de Lima y de la Policía Nacional pudieron llegar a algunos de los almacenes donde se albergaban varias especies silvestres. Sin embargo, como el propio responsable de la investigación indicó, quedan más guaridas de este tipo por ser descubiertas y más animales indefensos por ser rescatados.