Sociedad

Puno: Dan tregua de 10 días a Gobierno para suspender Vilavilani II sino advierten nuevo aimarazo

Pobladores aimaras de Capaso, Mazocruz, Pizacoma, Kelluyo, dieron un nuevo plazo el gobierno de Martín Vizcarra. Consideran que proyecto hidráulico será perjudicial tanto para Puno como para Tacna.

Puno. Aimaras tuvieron importante reunión desde donde hicieron advertencia al Gobierno.
Puno. Aimaras tuvieron importante reunión desde donde hicieron advertencia al Gobierno.

Puno. Pobladores aimaras de Capaso, Mazocruz, Pizacoma, Kelluyo, dieron un nuevo plazo de diez días hábiles para que el gobierno de Martín Vizcarra, paralice la construcción de la obra Vilavilani II. Este supone el trasvase de aguas altoandinas de Puno hacia la región Tacna.

El plazo otorgado es la última fase de predisposición de diálogo porque al distrito Capaso, provincia de El Collao- Ilave no asistieron ministros de gobierno para participar de la reunión donde acudieron cientos de pobladores que se consideran afectados por el proyecto hidráulico.

Se esperaba que llegue el presidente del Consejo de Ministros, Vicente Zeballos, y ministros de diversas carteras. El Gobierno solo delegó como representante a Julver Vilca Espinoza, director del Proyecto Especial Lago Titicaca (Pelt).

Estuvo presente además el gobernador Agustín Luque, Dante Coasaca (gerente general del Gobierno Regional de Puno) Juan Monzón, asesor regional, además de alcaldes provinciales, distritales, entre otras autoridades locales.

En el encuentro que se llevó en la Plaza de Armas de Capaso, se determinó que el plazo no es negociable y después darán vida al segundo aimarazo birregional indefinido entre Puno y la población de la provincia de Tarata región Tacna. Se prevé el cierre de provincias y carreteras y marcha masiva a la ciudad de Puno.

La paralización es un acuerdo el cual no variarán porque se concluyeron de manera unánime que: “Vilavilani, no va”.

El gerente de Recursos Naturales del Medio Ambiente del Gobierno Regional, Santos Donato Ramos Ccopa, dijo que la obra hidráulica será perjudicial. Advirtió que se captará aguas de la cabecera del río Maure. Este es un afluente compartido por Perú y Bolivia. Las aguas llegan hasta Oruro-Bolivia.

Los comuneros de Pizacoma y Kelluyo y otros, sectores advirtieron que también serán perjudicados. Precisaron que actualmente los bofedales, únicos espacios de alimentación natural de sus animales, se secarían. Actualmente el agua llega por distintos riachuelos.

“La Autoridad Administrativa del Agua Caplina Ocoña, indebidamente ha autorizado el uso de aguas binacionales. Eso es irregular”, dijo.

El gobernador de Puno, Agustín Luque destacó la necesidad de unir esfuerzos entre todas las especialidades para que este proyecto sea paralizado. Dijo que ya se accionó ante el Poder Judicial.

Los trabajos contemplan la construcción de una bocatoma para reencausar 360 litros de agua por segundo del río Ancoaque. El líquido será transportado por una tubería subterránea en una extensión de 42 kilómetros hasta llegar al túnel Azancallani, en la región Tacna. Al captar aguas en las zonas altas indefectiblemente afectará a las partes bajas.

Las autoridades y dirigentes de Tarata también acordaron sumarse a la medida de fuerza. Al igual que sus pares de Puno, no creen que la obra solo sea para fines agrícola y de consumo humano. Están seguros que detrás están grandes intereses mineros pero es presentado como una obra de fin social. “Cuándo tienen intereses y detrás hay negocios mineros, cuándo dicen la verdad. Quienes han robado al país con el caso Lava Jato, cuándo han dicho que se hacían de obras coimeando. Por el contrario se mostraban como los más limpios y que sus negocios lo hacían transparentemente”, dijo el dirigente Antonio Lajo.

El asesor regional Juan Monzón, reiteró que la obra si o si debe paralizarse por varias razones. Hizo hincapié que los estudios datan de años y que a este tiempo los impactos serían otros y más perjudiciales.

Bernabé Ordoñez, dirigente de Capaso, indicó que sí o sí el paro será una realidad porque ya probaron el sinsabor de demasiadas mecidas.