Coronavirus: penales del norte en su hora más crítica
Defensoría del Pueblo pidió al INPE tomar acciones urgentes para proteger la vida de reos y agentes en los recintos penitenciarios de Chiclayo, Piura y Trujillo.
Coronavirus en Perú. La Defensoría del Pueblo pidió al director de la Oficina Regional Norte del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Edinson Alvarado Ortiz, adoptar acciones urgentes en los penales de Chiclayo, Trujillo y Piura para proteger la vida de los internos y del personal del INPE frente al avance del COVID-19.
Según el oficio n.° 422, firmado por los titulares de las Oficinas Defensoriales, la situación se ha vuelto insostenible tras los motines realizados en los tres establecimientos penitenciarios, donde no se conoce con exactitud la cifra de contagiados ni de fallecidos a causa del coronavirus.
“El principal motivo de las protestas radica en el temor al contagio por COVID-19, la falta de información para prevenirlo, la deficiente atención en los tópicos de salud, el hacinamiento y la ausencia de un plan público de acción frente al coronavirus”, se lee en el documento.
Según la Defensoría, la Oficina Regional Norte del INPE no ha informado sobre las medidas extraordinarias que se han tomado en los penales, las coordinaciones con el Ministerio de Salud, ni sobre el aislamiento, hospitalización y salubridad de quienes habitan al interior de los reclusorios, lo que genera preocupación.
“La inacción o demora en el desarrollo de políticas destinadas a garantizar la salud de los internos puede conllevar a la pérdida de vidas que generen una responsabilidad nacional e internacional del Estado por incumplimiento de sus obligaciones como garante de los derechos de estas personas”, refieren.
En ese sentido, el jefe de la Oficina Defensorial de Lambayeque, Julio Hidalgo Reyes, pidió la implementación de brigadas de salud itinerantes en los penales, la dotación de pruebas rápidas y el reforzamiento de los call center para informar a los familiares sobre el estado de salud de los presos.
En el caso del penal de Chiclayo, para una población de 4680 internos solo se cuenta con 2 médicos y 7 enfermeras, quienes tampoco cuentan con el equipo completo de protección personal para evitar el contagio del coronavirus. Los tres motines registrados en este recinto penitenciario ocasionaron la muerte de tres internos.