Política

Congreso: ¿qué se juega en la elección de la próxima Mesa Directiva y cuáles son las alternativas?

La Mesa Directiva del Parlamento se mantendría bajo el liderazgo de las fuerzas de oposición y asoman como principales alternativas para reemplazar a María del Carmen Alva el legislador José Williams, de Avanza País, y Eduardo Salhuana, de Alianza para el Progreso.

Especialistas advierten que principales rostros para reemplazar a María del Carmen Alva no muestran una posibilidad de cambio en la dirección del Congreso. Foto: diseño de Jazmín Ceras / La República
Especialistas advierten que principales rostros para reemplazar a María del Carmen Alva no muestran una posibilidad de cambio en la dirección del Congreso. Foto: diseño de Jazmín Ceras / La República

El deseo de María del Carmen Alva de reelegirse en la presidencia de la Mesa Directiva se vio sepultado por la filtración de unos audios que pusieron en evidencia algo aún más grande: la posibilidad de que el próximo titular del Congreso se convierta en el nuevo presidente de la República. Esto ocurriría en un escenario en el que Pedro Castillo se vea obligado a renunciar debido a la presión ejercida por los avances de las investigaciones de la Fiscalía de la Nación o ante una vacancia producto de los consensos de las fuerzas políticas del Poder Legislativo. A la par, la acusación constitucional en contra de su vicepresidenta Dina Boluarte podría dejarlo sin un sucesor para el cargo, por lo que la elección del que reemplazará a Alva cobra mayor relevancia.

La actual legislatura tenía previsto culminar el pasado 15 de junio, pero, como uno de sus últimos gestos desde la silla más alta del Hemiciclo, María del Carmen Alva la amplió hasta el próximo 8 de abril. No obstante, la siguiente igualmente deberá empezar el 27 de julio, por lo que en las próximas semanas se vivirá una elección de los nuevos integrantes de la Mesa Directiva del Congreso, que será clave para el futuro del país.

Al respecto, José Luis Ramos Salinas, sociólogo y analista político de la Universidad Nacional San Agustín de Arequipa, señaló en entrevista con La República que probablemente el Parlamento se alista para elegir a quien será el nuevo jefe de Estado: “En realidad, el Congreso está pensando a quién van a elegir como presidente de la República. Con un poco más de 80 votos, ellos eligen al nuevo presidente, sin importar lo que opinen millones de ciudadanos. El problema está en que no buscarán elegir a un rostro amable o a alguien que pudiese ser aceptado por la ciudadanía, sino que van a elegir a alguien como la Sra. Alva”, comenta.

Por su parte, la politóloga Katherine Zegarra, en diálogo con este medio, considera que la elección de la nueva Mesa Directiva cobra especial relevancia ante la posibilidad de que esta sea la que lidere un nuevo Gobierno en los próximos meses: “Hay que tener en cuenta que la política peruana es poco predecible y en ese sentido no es descabellado pensar que la nueva Mesa Directiva sea la que encabece el Gobierno. (…) Estamos hablado de un Gobierno que puede caer; sin embargo, no conocemos de cuándo y no tenemos certezas sobre cuánto podría durar el Gobierno de Pedro Castillo. Lo que sí parece probable es que no dure los cinco años”, declaró.

Si bien existió, en julio del 2021, un acuerdo durante la elección de Alva para que quien asuma la presidencia de la Mesa Directiva al siguiente año sea Alianza Para el Progreso (APP), este pacto sin acta firmada podría no ser respetado y ese parece ser el camino que seguiría Avanza País, quien empieza a conversar con otras bancadas para tantear el terreno ante una posible candidatura de José Williams, quien maneja un perfil más cercano a las fuerzas de oposición del Congreso.

Ante ello, Ramos Salinas advierte que una presidencia de Alianza para el Progreso o Avanza País nos ofrecería un año del Congreso similar al vivido con Alva a la cabeza: “Ya APP ha mostrado su intención de ocuparla. Incluso el acuerdo de nombrar a Alva implica que luego les tocaba nombrarlos a ellos. En realidad, las diferencias entre uno y otro son mínimas porque no representan un proyecto político o ideológico, menos una reforma para atender al país. (…) Lo que tendremos es una continuación de lo que ya pasó antes (con Alva)”, sostiene.

Por su parte, Katherine Zegarra advierte que el Congreso necesita a una persona que no tenga cuestionamientos y que no genere un rechazo inmediato de parte de la población para que contraste con la impopularidad de María del Carmen Alva. Esta persona debería venir de las filas de oposición: “Las fuerzas del Congreso se miden a través de los números. En ese sentido, los partidos que tendrían mayor posibilidad serían aquellos que tengan un número importante de integrantes y logren generar consensos con otras bancadas. Creo que quienes más tendrían posibilidades serían fuerzas de oposición, pero que tengan características de una oposición que no haya sido recalcitrante con el oficialismo”, agregó.

Los principales rostros para la presidencia del Congreso

Al parecer, la presidencia del Congreso se mantendría cercana a las fuerzas de oposición y por ello las principales bancadas, como Fuerza Popular, Renovación Popular, Avanza País, se sentirían más cómodas con una candidatura —por parte de APP— de Gladys Echaíz o Roberto Chiabra, ambos personajes abiertamente críticos a la gestión de Pedro Castillo. El problema recae en que no tendrían el respaldo de su propia bancada al ser congresistas invitados, además de que lo usual es que sus votaciones e intervenciones en el Parlamento suelen tener un rol disidente con respecto a la postura de Alianza para el Progreso en algunos temas claves.

La principal carta de APP sería Eduardo Salhuana, quien se desempeña como vocero de la bancada y, al ser una persona alineada con las decisiones partidarias y la política de César Acuña, se muestra como una de las principales opcionespara reemplazar a María del Carmen Alva. Además, es una persona que podría encontrar consensos con el oficialismo y las bancadas de izquierda al no haber mostrado un perfil confrontacional contra el Gobierno desde que asumió como parlamentario.

El fraccionamiento de Perú Libre parece haberlos dejado sin alternativas reales de ganar la presidencia, ya que ahora tendrían que consensuar entre los que quedan en el oficialismo y las nuevas bancadas, Perú Democrático, Perú Bicentenario y Bloque Magisterial, todas con exintegrantes del oficialismo.

“Son ahora más bancadas que las que había antes, pero el número de congresistas no ha aumentado, así que, sumadas las bancadas, los votos no son suficientes para impedir los acuerdos del otro bloque. Ellos tienen los votos suficientes para que la Mesa Directiva sea de ellos”, expresa José Luis Ramos Salinas.

Salhuana no sería del gusto de la oposición, por lo cual Avanza País tendría en mente a José Williams Zapata, quien ya estaría realizando sus primeros acercamientos a otras bancadas para ver si su candidatura podría contar con apoyo. Su marcada postura de oposición podría ayudarlo a encontrar los consensos necesarios para imponerse ante Salhuana. También le permitiría llegar a acuerdos para integrar una lista con Fuerza Popular y Renovación Popular, y lograr el apoyo de las bancadas de centro, como Somos Perú y Acción Popular.

Periodista por de la Universidad Nacional Federico Villarreal y con estudios en antropología por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Actualmente, escribo sobre política en La República. Durante mi carrera he abordado temas sociales, políticos y culturales. También me desempeño en el campo de la escritura creativa.